Ante un caso de eutanasia, la Pastoral Social neuquina reiteró que "nunca dejar morir será un derecho"

El Equipo de Pastoral Social de la diócesis de Neuquén emitió un comunicado en el que lamentan que el Poder Judicial de la provincia no se responsabilice de "cuidar la vida digna de todas las personas, especialmente la de los más vulnerables", en referencia al caso de Marcelo Diez, quien permanece en estado de coma desde 1994 a raíz de un grave accidente que tuvo cuando conducía en moto, y que podría ser desconectado luego de un fallo judicial. "Nunca el dejar morir a una persona de hambre y sed será un derecho de nadie", dijeron.

El Equipo de Pastoral Social de la diócesis de Neuquén emitió un comunicado en el que lamentan que el Poder Judicial de la provincia no se responsabilice de "cuidar la vida digna de todas las personas, especialmente la de los más vulnerables", en referencia al caso de Marcelo Diez, quien permanece en estado de coma desde 1994 a raíz de un grave accidente que tuvo cuando conducía en moto, y que podría ser desconectado luego de que la Sala Civil del Tribunal Superior de Justicia resolviera el lunes que no se requiere un fallo para cesar el soporte vital del paciente.

En este sentido, el Equipo de Pastoral Social reafirmó el magisterio del obispo diocesano, monseñor Virginio Bressanelli SCJ, quien se expresó el año pasado al respecto: "No podemos callar ante un hecho que consideramos un verdadero ataque a la vida. Debido a que el padre Virginio se encuentra en estos días fuera del país, por tareas pastorales, queremos hacernos eco de lo que seguramente él expresaría ante este hecho".

El texto, firmado por los integrantes del equipo, entre los que destaca el presbítero Rubén Capitanio, se expresa que la Iglesia respeta el dolor de la familia de Marcelo Diez, aunque no comparte su pedido legal y su decisión última. Además, comprenden que la Justicia "limita una decisión al ámbito privado, cuando es su responsabilidad cuidar la vida digna de todas las personas, especialmente la de los más vulnerables".

Del mismo modo, la Pastoral Social mostró su apoyo al instituto de Lucha Neuquina contra el Cáncer (LUNCEC), donde se encuentra hospitalizado Marcelo Diez. "Acompañamos la decisión de LUNCEC, institución que trabaja por la vida y no acepta ser instrumento de muerte, reconociendo el gran servicio y esfuerzo que hacen a todos los enfermos que atienden", dijeron.

Finalmente, advirtieron que Marcelo Diez "no está conectado a ningún soporte especial que lo mantiene vivo", sino que "simplemente se lo alimenta y se lo cuida como todo ser humano tiene derecho y para que no adquiera alguna infección que agrave su situación actual".

"La decisión de la Sala Civil implica dejarlo morir de hambre y de sed", sentenciaron, a la vez que agregaron: "Podrá ser legal, pero resulta ilegítima porque por encima de cualquier idea religiosa, científica o cultural, nunca el dejar morir a una persona de hambre y sed será un derecho de nadie".

En tanto, el la directora del LUNCEC, Nora Serrano de Salvatori, informó que, de quedar firme la resolución, solicitará el traslado del paciente a otro centro médico. La presidenta del centro asistencial había afirmado a los medios locales que en su institución "lucha por la vida, no por la muerte".+