El pontífice estará en el país africano del 3 al 5 de febrero, en un viaje que estará centrado en la paz y el diálogo interreligioso. Mientras tanto, los asesinatos y la violencia continúan.
Para Navidad y Año Nuevo, Mons. Álvarez Gómez pidió "reconciliación, perdón y paz" a los distintos actores armados de la zona.
Es parte del llamamiento de los obispos de Haití en su mensaje de Navidad, para que los grupos armados y quienes los financian detengan "la locura del odio y el desprecio por la vida".
Antes de culminar el Ángelus dominical, el Santo Padre manifestó su interés para que se "emprenda la vía del diálogo con el fin de superar la crisis política y social" en el país andino.