El obispado de San Luis manifestó el apoyo a la iniciativa que impulsó la comunidad de la parroquia Nuestra Señora de los Dolores, seriamente afectada por una tormenta severa.
Esa gran obra, inaugurada en 1940, está en funcionamiento nuevamente, ahora a cargo del obispado de San Luis. Monseñor Barba presidió la ceremonia de reapertura el pasado 27 de septiembre.
Los obispos organizadores del encuentro animan a renovar el compromiso misionero: "El congreso tiene esa tarea de animar, sostener y ayudar a despertar esa vocación misionera de la Iglesia".
En la fiesta de San Luis Rey, el obispo animó a tener un corazón sensible y puso bajo la protección del santo patrono de la provincia a quienes sufren por "haber perdido la dignidad en sus distintas".