Así tituló el arzobispo de San Juan de Cuyo y secretario general del CELAM su columna para este domingo 12 de febrero, relacionada sobre todo con la Jornada Mundial del Enfermo.
El arzobispo emérito de Corrientes, en sus sugerencias para la homilía del domingo, se refirió a la Ley, al magisterio de Jesús, a nuestro trato con Él y a la legitimidad de las leyes humanas.
Bajo ese título, el obispo de Formosa reflexionó acerca de la vocación sacerdotal, la Cuaresma y la forma de encarar este nuevo año.
El obispo de san Francisco aludió también a los testigos de la fe que han iluminado nuestras vidas con sus palabras y su ejemplo.