Así lo manifestó el pontífice en una entrevista con la emisora estadounidense CBS, en referencia a todos los conflictos bélicos que actualmente están en curso en el mundo.
Al dirigirse a miembros de la Acción Católica Italiana, el pontífice reflexionó sobre tres tipos de abrazos: los "perdidos", los salvadores y los transformadores de vidas.
Después de centrarse en las virtudes cardinales, Francisco enfocó su catequesis en las teologales, como prendas de la presencia y acción del Espíritu Santo en las facultades del ser humano.
El Papa volvió a recordar a los países donde continúan las guerras. "Mis pensamientos se dirigen a las torturadas Ucrania, Palestina, Israel y Birmania, y a tantos otros países", expresó.