El obispo auxiliar, monseñor Wagner, elogió la labor de los voluntarios, equiparándola con la actitud de María en su visita a Isabel, y animó a vivir el Adviento con sensibilidad de corazón
El obispo de Posadas meditó sobre esa virtud, particularmente en lo que respecta a los jóvenes.
El obispo de Mercedes-Luján animó a la comunidad diocesana, a ejemplo del purpurado, a dar esperanzas a otros en este tiempo de preparación a la Navidad, asegurando que "dar ánimo es dar a Dios".
El obispo de San Francisco, en su mensaje para el segundo domingo de Adviento, se refirió a la virtud de la esperanza.