Viernes 19 de abril de 2024

Unos 50 presos visitaron el Vaticano en la antesala del Jubileo de la Misericordia

  • 14 de septiembre, 2015
  • Ciudad del Vaticano
Este domingo por la mañana, 50 presos de la cárcel de Rebibbia en Roma, realizaron una visita a los Jardines Vaticanos, la Basílica de San Pedro y la Capilla Sixtina. El director de los Museos Vaticanos, Antonio Paolucci, fue el encargado de guiar la visita de los reclusos que a las 12 participaron del rezo del Ángelus con el Santo Padre. La jornada, señala Radio Vaticana, fue un anticipo del Jubileo de la Misericordia que comenzará en la solemnidad de la Inmaculada Concepción, el 8 de diciembre, y concluirá el 20 de noviembre de 2016 con la solemnidad de Cristo, Rey del Universo.
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Este domingo por la mañana, 50 presos de la cárcel de Rebibbia en Roma, realizaron una visita a los Jardines Vaticanos, la Basílica de San Pedro y la Capilla Sixtina.

El director de los Museos Vaticanos, Antonio Paolucci, fue el encargado de guiar la visita de los reclusos que a las 12 participaron del rezo del Ángelus con el Santo Padre.

La jornada, señala Radio Vaticana, fue un anticipo del Jubileo de la Misericordia que comenzará en la solemnidad de la Inmaculada Concepción, el 8 de diciembre, y concluirá el 20 de noviembre de 2016 con la solemnidad de Cristo, Rey del Universo.

Los presos estuvieron acompañados por el director de la cárcel, Stefano Ricca, quien relató a la radio que "estas emociones permanecerán en nuestro corazón y en nuestra mente durante largo tiempo".

"Para los detenidos, claramente esto asume un valor particular: en lugar de transcurrir una mañana más en el interior del instituto penitenciario, poder participar en una visita en exclusiva, que nos fue ofrecida este domingo, y ver los Museos Vaticanos conmovió a los detenidos, que participaron de este excepcional acontecimiento".

Carmine, uno de los presos, aseguró que "fuimos recibidos de una manera muy especial; algo que es difícil para cualquier encarcelado en la sociedad; ya que somos observados siempre con un ojo particular. Sin embargo, en esta ocasión fuimos tratados como si fuésemos personas importantes. Fue una gran emoción para todos nosotros, algo indescriptible".

La Cárcel de Rebibbia se encuentra en los suburbios de Roma y a ella acudió en varias ocasiones Francisco para celebrar el Jueves Santo, realizando el Lavatorio de los Pies a los presos.+