Ucrania: Navidad bajo una lluvia de bombas

A causa de los ataques, el arzobispo mayor de la Iglesia Greco-Católica Ucraniana, Su Beatitud Sviatoslav Shevchuk, celebró la misa de la solemnidad en el refugio antiaéreo de la catedral de Kiev.

"Hoy, el Señor nos llamó a ir al lugar donde la gente encontró refugio. Fue allí donde Jesús recién nacido quiso que lo encontráramos: en el refugio antiaéreo. Nació entre niños, ancianos y mujeres", expresó el arzobispo mayor de la Iglesia Greco Católica Ucraniana, Su Beatitud Sviatoslav Shevchuk, en la celebración de la misa navideña celebrada en el refugio antiaéreo ubicado en las criptas de la catedral patriarcal

Lamentablemente, el 25 de diciembre estuvo marcado por una lluvia de misiles y drones rusos sobre Ucrania. Un ataque masivo llevado a cabo por las fuerzas de Moscú afectó inicialmente a la ciudad de Járkov, en el este del país, antes de extenderse a otras regiones. La fuerza aérea de Kiev informó haber derribado 113 misiles y drones de un total de 184  lanzamientos rusos, entre los que estaban incluidos 59 misiles.

En su homilía, Shevchuk subrayó, "hoy el Hijo de Dios ha nacido en la carne, en el sufrimiento, en la esperanza del pueblo ucraniano", y añadió: "Celebrar hoy la Navidad significa comprobar de primera mano que la luz que Cristo nos da es más fuerte que la oscuridad. Incluso cuando esta oscuridad se acumula a nuestro alrededor, sólo hace que la luz de Cristo sea aún más brillante". 

"Hoy, el calor del amor de Dios envuelve a cada persona, a cada familia, porque el Señor quiere que sintamos que está con nosotros", expresó el arzobispo mayor. 

Shevchuk también dedicó un pensamiento a "quienes están sufriendo las heridas del ataque de la mañana, en la quema de Járkov, en las ciudades y pueblos del sur, este y oeste de Ucrania". 

Luego habló de quienes, en las trincheras, defienden el país: "Que nuestro saludo llegue a los hospitales, a todas las salas donde nuestros defensores curan sus heridas; a los desplazados internos; a quienes han perdido familiares, casas, departamentos, bienes; a aquellos cuyas vidas y cuyo mundo han sido destruidos por el enemigo". 

"Que las felicitaciones navideñas lleguen a todas las comunidades: a las lejanas Singapur y Tokio, a Siberia y Kazajstán, a los territorios ocupados y Crimea, a nuestros fieles en Australia, Argentina, Brasil, América del Norte, Europa occidental y hasta los confines de la tierra, en todas partes, donde late el corazón ucraniano", continuó Su Beatitud Sviatoslav.

"¡Señor, ven a nosotros hoy! ¡Danos tu alegría y bendice nuestra tierra con tu paz celestial y justa! Les deseo a todos una feliz Navidad, un bendito Año Jubilar de la Esperanza, que el Papa Francisco inauguró solemnemente en la Ciudad Eterna, con la apertura de las Puertas Santas".

Una vez finalizada la alarma antiaérea, los servicios navideños continuaron en el templo catedralicio, donde se celebró la divina liturgia, presidida por monseñor Sviatoslav, mientras que monseñor Andrii Khimyak, obispo asistente de la arquidiócesis de Kiev, monseñor Stepan Sus, obispo curial del arzobispo mayor de Kiev, y el clero de la catedral colaboraron con el líder de la Iglesia.+