Jueves 21 de noviembre de 2024

Santa Rosa celebró sus fiestas patronales: "Nuestro oído en el corazón de Jesús"

  • 31 de agosto, 2020
  • Santa Rosa (La Pampa) (AICA)
"Santa Rosa nos enseñó a poner nuestro oído en el corazón de Jesús", dijo monseñor Raúl Martín, obispo de Santa Rosa, al presidir las fiestas patronales diocesanas, el domingo 30 de agosto.
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Con el lema “Santa Rosa: que amemos profundamente a nuestro pueblo pampeano”, la diócesis de Santa Rosa celebró el domingo 30 de agosto su fiesta patronal en honor de la patrona de América.

La fiesta central comenzó a las 15 con una autocaravana que recorrió las calles de la ciudad, hasta llegar a la catedral diocesana, donde monseñor Raúl Martín , obispo de Santa Rosa, presidió la misa. Fue acompañado por el párroco de la catedral, el presbítero Juan Carlos Cipolla, y sacerdotes de la ciudad. 

Algunos vehículos permanecieron frente a la catedral y escucharon por radio la celebración, que también fue transmitida a través de las redes sociales.

“Celebramos la fiesta de una pequeñísima enorme santa, que desde un lugar escondido se dio cuenta de que Jesús valía la pena y siempre tenía que aparecer Él primero”, comenzó diciendo el obispo en su homilía. “Esta santita del 1600, vivió apenas 31 años y, sin embargo, se hizo patrona de América, de nuestra diócesis, de la policía y de tantos otros lugares”, recordó. 

Luego el prelado se refirió a los “tiempos tan particulares” con que toca vivir esta fiesta, “con dolor, incertidumbre y desconcierto, con una paciencia infinita, sin saber el horizonte, donde también tuvimos que aprender a cuidarnos”, y agregó que “pensaba cuál podría ser la manera de celebrarlo, porque nuestro pueblo está medio triste y desconcertado, y qué bueno sería algo que, aunque la distancia los separe, sea un gran abrazo de Dios”.

Haciendo referencia a los lugares recorridos en la novena, la cárcel, el Carmelo, el hospital, los espacios de jóvenes, monseñor Martín los definió como algunos lugares que “son el dolor manifiesto de nuestro pueblo necesitado”. Pero hizo mención a la recorrida del padre Juan Carlos, párroco de la catedral, que “llevó a Santa Rosa a cada uno de estos lugares. Fuimos recorriendo cada comunidad, donde había que poner un toquecito de esperanza y de la misericordia de Dios. Y así se fue haciendo nuestra fiesta". 

Monseñor Martín habló de los tres amores de Santa Rosa: “Amó a Jesús y abrazó también su cruz. Amó profundamente a María, porque como madre que es nuestra, ella también sabía que tomada de su mano no equivocaría el camino. Y amó profundamente a todos los desvalidos. Tres amores muy fuertes, y junto a la cruz, la eucaristía. Por eso, pensaba qué debería tener hoy para decirnos y enseñarnos: Ella fue una hermosa testigo del amor de Dios, expresó con su vida que toda vida vale, descubrió que toda vida era amada y querida por Dios, y así también somos importantes unos para otros”.

“Santa Rosa nos enseñó también a poner nuestro oído en el corazón de Jesús, para rezar en el corazón de Dios. Seguro ella le pedía el regalo de la misericordia, porque solo así se hizo capaz de misericordia con los demás. Qué lindo aprender de ella a mendigar de Dios la misericordia para regalarla a los demás. También nos enseñó que el camino debíamos hacerlo con nuestros hermanos. Y supo que, para poder hacer el camino al cielo, necesita abrazar la cruz de Jesús y alimentarse con el pan de la eucaristía”. 

Finalmente, monseñor Martín dijo que esta santa, “gastó sus 31 años sabiendo que Jesús estaba en el rostro del desvalido, del enfermo, del que estaba solo. Le pedimos con insistencia al Señor: 'Regalanos la sabiduría que le regalaste a esta santita, que de la mano suya y de María que tanto amó, lleguemos nosotros también a encontrarnos con vos en el cielo”. +