Lunes 3 de febrero de 2025

Nicaragua: la CLAR se solidariza con las víctimas de la persecución religiosa

  • 3 de febrero, 2025
  • Bogotá (Colombia) (AICA)
La Confederación Latinoamericana de Religiosos se solidarizó con las hermanas clarisas, recientemente expulsadas del país centroamericano.
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La Confederación Latinoamericana de Religiosos (CLAR), expresó su apoyo a los religiosos y religiosas que continúan siendo víctimas de persecución y exilio en Nicaragua. 

En un comunicado, la CLAR manifestó: "Nos solidarizamos con las víctimas religiosas de la persecución y el exilio, a quienes se les impide ejercer su ministerio en Nicaragua". 

"Pedimos respeto a la vida y libertad de las personas religiosas", se lee en el comunicado, escrito tras conocerse la noticia del desalojo de las monjas clarisas de sus tres monasterios en el país, ubicados en Managua, Chinandega y Matagalpa.

La CLAR recuerda que la comunidad de las Clarisas ya había sido perseguida durante años y que el estatus legal de la congregación, otorgado en 2004, había sido suspendido sin justificación por el gobierno de Nicaragua, el 19 de mayo de 2023. Casi una semana después del desalojo, se desconoce el paradero de las hermanas, lo que ha provocado preocupación en la comunidad católica y en organismos internacionales. 

De ahí que la Confederación de Religiosos instó a la comunidad internacional a intervenir y ejercer presión, para garantizar el respeto a los derechos humanos y la libertad de culto en Nicaragua.

El régimen de Daniel Ortega no cesa en su persecución contra la Iglesia católica en Nicaragua. El último caso fue contra las Hermanas Clarisas, quienes fueron expulsadas de sus monasterios. Durante la noche del 28 y la madrugada del 29 de enero, autoridades militares ingresaron a la fuerza en las sedes de la comunidad obligando a unas 30 religiosas de clausura abandonar los monasterios ubicados en Managua, Matagalpa y Chinandega. A su salida, solo les permitieron llevar consigo unas pocas pertenencias, mientras las fuerzas afines al gobierno tomaban posesión de los conventos y saqueaban sus bienes.

Este panorama evidencia una vez más que la persecución contra miembros de la Iglesia en Nicaragua, aunque no es nueva, se ha intensificado dramáticamente desde abril de 2018. Así también, se expandió desde la implementación de una ley promulgada en 2022, que endureció las restricciones contra entidades religiosas, por lo que varios miembros de congregaciones han sido expulsados del país o se vieron obligados a salir de él por su seguridad.+