Miércoles 30 de octubre de 2024

Mons. Bressanelli presidió la misa por la Inmaculada en el Cerro de Chos Malal

  • 9 de diciembre, 2015
  • Chos Malal (Neuquén)
El obispo de Neuquén, monseñor Virginio Bressanelli SCJ, presidió el martes 8 de diciembre la misa de la Inmaculada Concepción de la Virgen María en el Cerro de Chos Malal, donde se inauguró el nuevo monumento a María Auxiliadora, Madre del Neuquén. La obra fue realizada por el arquitecto y artista plástico Alejandro Santana, y será la estación superior de una "Vía Mariae" (el Camino de María). El prelado llamó a la feligresía neuquina a redescubrir las obras de misericordia corporales y espirituales durante el Año Jubilar de la Misericordia.
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El obispo de Neuquén, monseñor Virginio Bressanelli SCJ, presidió la misa de la Inmaculada Concepción de la Virgen María en el Cerro de Chos Malal, donde se inauguró el nuevo monumento a María Auxiliadora, Madre del Neuquén. La obra fue realizada por el arquitecto y artista plástico Alejandro Santana, y será la estación superior de una "Vía Mariae" (el Camino de María).

El prelado recordó que el papa Francisco eligió el 8 de diciembre para dar comienzo al Año Jubilar de la Misericordia, por coincidir con el quincuagésimo aniversario de la conclusión del Concilio Vaticano II, al que la Iglesia siente "la necesidad de mantener vivo".

"Redescubramos las obras de misericordia corporales: dar de comer al hambriento, dar de beber al sediento, vestir al desnudo, acoger al forastero, asistir los enfermos, visitar a los presos, enterrar a los muertos. Y no olvidemos las obras de misericordia espirituales: dar consejo al que lo necesita, enseñar al que no sabe, corregir al que yerra, consolar al triste, perdonar las ofensas, soportar con paciencia las personas molestas, rogar a Dios por los vivos y por los difuntos", subrayó citando la bula Misericordiae vultus, del pontífice argentino.

Por último, monseñor Bressanelli explicó el logo del Año Jubilar, al que consideró "un compendio teológico de la misericordia" y se refirió al lema del jubileo "Misericordiosos como el Padre", que propone vivir la misericordia "siguiendo el ejemplo del Padre, que pide no juzgar y no condenar, sino perdonar y amar sin medida".+