Los fieles nicaragüenses llenaron las iglesias en Semana Santa

La Iglesia realizó las celebraciones del Triduo Pascual dentro de los templos y algunos de los feligreses que desafiaron la prohibición fueron perseguidos y al menos tres de ellos, encarcelados.

El arzobispo de Managua, cardenal Leopoldo José Brenes Solórzano, expresó este domingo su alegría por la masiva asistencia de católicos a los templos durante Semana Santa, después de que las autoridades de su país prohibieran a la Iglesia católica celebrar las procesiones en las calles.

"Me alegro porque los informes, los comentarios que recibí de los sacerdotes, de sus parroquias, es que en todas las celebraciones de Triduo Pascual, nuestros templos estuvieron prácticamente llenos", afirmó el cardenal Brenes, durante su homilía en la misa de Pascua.

El arzobispo nicaragüense indicó que los católicos nicaragüenses vivieron la Cuaresma con "altibajos, pero al final aquí estamos". El Gobierno que preside Daniel Ortega y su esposa, Rosario Murillo, a través de la Policía Nacional, prohibió a la Iglesia sacar las imágenes de los santos a las calles desde febrero pasado, y no la autorizó celebrar las procesiones de viacrucis durante la Cuaresma.

"El Señor nos ha bendecido”
"He sentido la bendición y la gracia del Señor, dado que en nuestras principales celebraciones la iglesia catedral estuvo totalmente llena", continuó el purpurado, que destacó en especial la masiva participación en el viacrucis penitencial que se celebró alrededor de la catedral de Managua. 

"Allí están nuestros fieles, en acción de gracia al Señor, participando y viviendo los grandes misterios. Creo que el Señor nos bendijo y, sin duda alguna, este tiempo lo hemos celebrado con mucho gozo, con mucha interioridad", señaló. El arzobispo de Managua también resaltó que miles de católicos siguieron de forma virtual las Eucaristías durante la llamada "Semana Mayor", a través de las transmisiones que en directo hace la arquidiócesis de Managua en sus redes sociales.

Prohibiciones diversas
Según datos de la investigadora Martha Patricia Molina, en Nicaragua se prohibió la realización de 3.176 procesiones de la Semana Santa en 2023. Este cálculo lo saca Molina al multiplicar las 397 parroquias que existen en Nicaragua por las ocho procesiones que tradicionalmente realiza cada una durante esta semana.

Molina, quien es abogada de profesión, recordó que, con la prohibición de las procesiones religiosas, el régimen nicaragüense viola el artículo 29 de la Constitución Política de Nicaragua, que establece que “toda persona tiene derecho a la libertad de conciencia, de pensamiento y de profesar o no una religión. Nadie puede ser objeto de medidas coercitivas que puedan menoscabar estos derechos”.

Aunque ni el gobierno, ni la Policía ni la alta jerarquía católica notificaron formalmente la suspensión de las procesiones en todo el país esta Semana Santa, por separado y en distintos momentos, diversas parroquias de Nicaragua informaron a su feligresía la suspensión este año de las tradicionales actividades religiosas que se celebran en las calles.

Algunas parroquias adujeron “motivos ajenos” y, en otros casos, se explicó que la decisión se tomó después de la visita de “autoridades policiales”.

Desde agosto del año pasado, el régimen nicaragüense prohibió, “por razones de seguridad”, las actividades religiosas que implican concentraciones o movilización de personas en las vías públicas, como parte de la represión que mantiene contra la Iglesia católica.

Hasta diciembre del año pasado, la investigadora Molina, documentó 396 agresiones de parte del régimen a la iglesia desde abril de 2018. Estas agresiones registradas van desde encarcelamiento y destierro de sacerdotes hasta ataques físicos, sacrilegios, y campañas de difamación.

Actualmente, el obispo de Matagalpa, monseñor Rolando Álvarez, permanece preso, condenado a 26 años de cárcel por los delitos de “traición a la patria” y “propagación de noticias falsas”, dos de los cargos más recurrentes del régimen para encarcelar a opositores. Otros dos sacerdotes fueron condenados también, acusados de delitos comunes.

Represión en un intento de procesión el Lunes Santo
A pesar de la prohibición, algunos jóvenes intentaron recrear en el poblado de Nindirí, el Lunes Santo, la llamada “Procesión de los Cirineos” que se realiza en honor al hombre que ayudó cargar la cruz a Jesucristo en su camino al Calvario.

La Policía nicaragüense impidió que los jóvenes, con vestimenta a la usanza de la época de Jesús, realizasen la procesión; y en algunos videos se ve a unas 20 personas corriendo por las calles, algunos cargando cruces, perseguidos por la policía. Tres de esos jóvenes fueron finalmente apresados. 

“La policía de la dictadura de Daniel Ortega mantiene bajo sitio el municipio de Nindirí desde el lunes 3 de abril, tras prohibir la procesión de los Cirineos, una actividad tradicional de la Semana Santa. Las casas de varios católicos que salieron ese día a participar en la procesión se mantienen vigiladas por policías y civiles armados; y al menos dos patrullas policiales recorrieron el municipio con numerosos agentes antidisturbios, usando el característico uniforme negro, ocultando sus rostros con pasamontañas y portando armas largas”, según describió el diario La Prensa.

Por otro lado, el mismo Lunes Santo fue expulsado de Nicaragua el sacerdote panameño Donanciano Alracón, a quien los policías detuvieron y dejaron en la frontera hondureña después de oficiar una misa en la ciudad de Estelí.

Medios nicaragüenses atribuyeron la expulsión del religioso a represalias por una procesión que se habría realizado en una parroquia del norteño municipio de San José de Cusmapa, pero, una vez llegado a su país, Panamá, el sacerdote aclaró que su salida se debió, posiblemente, a sus menciones en misa del obispo preso, monseñor Rolando Álvarez.

“Corrijo: no fue por una procesión… puede ser que haya sido imprudente en algún momento, porque en algún momento en las misas haya pedido por monseñor Álvarez, que es el obispo que está preso, que es mi obispo, cuando el Evangelio tocaba el tema de la justicia, yo también hablaba, creo que eso molestaba un poco; eso de la procesión es mentira, no hice procesión el domingo”, aclaró.+