Viernes 19 de abril de 2024

La justicia polaca dictaminó que no se debe retirar el crucifijo del Parlamento

  • 18 de diciembre, 2013
  • Varsovia (Polonia)
"No se puede ignorar la importancia del crucifijo como símbolo de identidad nacional y de la cultura polaca", afirmó el Tribunal de Apelaciones de Polonia al dictaminar que el crucifijo podrá permanecer en el Parlamento de Polonia ya que, según la sentencia, "no infringe ningún derecho". El veredicto rechaza así la demanda presentada por el partido polaco Movimiento Palikot, una fuerza liberal-anticlerical, que pedía retirar la cruz de la cámara baja. "Creo que la decisión del Tribunal es una prueba más que habla sobre el respeto de los polacos a la Cruz", afirmó el obispo de Radom, monseñor Henryk Tomasik, a la agencia católica KAI y declaró que la señal de la cruz está presente en numerosas expresiones culturales, como en las carreteras y las tumbas de muchas personas de los más diversos orígenes.
Doná a AICA.org
"No se puede ignorar la importancia del crucifijo como símbolo de identidad nacional y de la cultura polaca", afirmó el Tribunal de Apelaciones de Polonia al dictaminar que el crucifijo podrá permanecer en el Parlamento de Polonia ya que, según la sentencia, "no infringe ningún derecho".

El veredicto rechaza así la demanda presentada por el partido polaco Movimiento Palikot, una fuerza liberal-anticlerical, que pedía retirar la cruz de la cámara baja.

Según los demandantes la presencia de la cruz viola sus derechos a la libertad de conciencia y de religión, a la vez que contraviene lo dispuesto por la Constitución de Polonia y por las directivas de la Unión Europea y adelantaron que llevarán el caso al tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo.

Por otra parte diversos políticos celebraron la sentencia, considerando que refleja el sentir de la mayoría de los polacos. "Este caso era una broma grotesca", afirmó Andrzej Jaworski, diputado del partido opositor Ley y Justicia y responsable del comité del partido para combatir el ateísmo. "Formaba parte de la guerra del Movimiento Palikot contra la cruz", añadió.

La decisión judicial pone fin a este proceso, iniciado en 2011 cuando un grupo de diputados llevó a los tribunales la presencia del crucifijo en la pared frontal del hemiciclo que preside la sala principal.

"Creo que la decisión del Tribunal es una prueba más que habla sobre el respeto de los polacos a la Cruz", afirmó el obispo de Radom, monseñor Henryk Tomasik, a la agencia católica KAI y declaró que la señal de la cruz está presente en numerosas expresiones culturales, como en las carreteras y las tumbas de muchas personas de los más diversos orígenes.

El obispo también destacó que el fallo es beneficioso para poner fin a los debates sobre la presencia de símbolos religiosos en los lugares e instituciones públicas del país.

"Es importante que las personas no creyentes reconozcan los derechos de los creyentes de profesar públicamente la fe", afirmó el prelado polaco. En Polonia, más del 90 por ciento de la población profesa la fe católica.

La cruz está en el Parlamento de Polonia desde 2007, donde fue colgada de manera espontánea sin que nadie la haya retirado desde entonces.

En 2011 una encuesta de opinión reveló que el 71% de los polacos estaban a favor de la permanencia de la cruz.

La presencia del crucifijo en el Parlamento tiene un significado adicional para Polonia, ya que durante el dominio comunista de la Unión Soviética, la libertad religiosa de los polacos fue severamente restringida. El retorno de la Cruz a las instituciones públicas representa el regreso de la identidad polaca, marcadamente cristiana, a la determinación del rumbo de la sociedad. +