Viernes 22 de noviembre de 2024

La diócesis de Orán reafirma su compromiso con la vida

  • 28 de noviembre, 2020
  • San Ramón de la Nueva Orán (Salta) (AICA)
Mediante un comunicado del Consejo Pastoral Diocesano y un video grabado por el obispo, monseñor Luis Antonio Scozzina OFM, la diócesis de Orán reafirmó su compromiso con la defensa de la vida.
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El obispo de Orán, monseñor Luis Antonio Scozzina OFM, envió un videomensaje a los fieles de la diócesis y también de todas las confesiones cristianas “con quienes nos vamos a unir en la convocatoria de manifestar nuestra opción por la vida”. 

“Queremos juntos, todos los hombres de buena voluntad, manifestar nuestro compromiso por la construcción de una patria de hermanos, donde ninguno de sus hijos sea descartado, donde la opción por el cuidado de toda vida sea una convicción que ilumine, guíe nuestro modo de pensar y de obrar cotidianamente”, expresó. 

“Nuestro pueblo más sencillo, nuestras madres, nuestras abuelas, nos han enseñado que a la vida hay que aceptarla y asumirla como venga, en las circunstancias y en las realidades de mayor dificultad”, destacó el prelado. “Es un legado que tenemos de nuestros mayores en el cuidado de la vida”. 

“Por eso los invito a que este sábado hagamos este gesto de manifestarnos, de expresar nuestra convicción y nuestro deseo de que en nuestra patria se siga priorizando el cuidado de la vida, especialmente de aquellos que no han nacido, pero también de los niños y de tanta infancia desprotegida. Que Dios nos bendiga a todos y nos dé la gracia de vivir siempre en esta opción por la vida”.

Por su parte, el Consejo Pastoral Diocesano, tras una reunión llevada a cabo el 26 de noviembre, emitió un documento titulado “Honramos la vida” en el que asegura que “no pudo hacer ‘oídos sordos’ "ante una realidad “que nos interpela y que se nos está imponiendo”: el inminente tratamiento de la Ley sobre interrupción legal del embarazo.

En ese sentido, quiso hacer público su pronunciamiento en defensa de las dos vidas. Citando al papa Francisco en su última encíclica, el Consejo Pastoral advirtió que “partes de la humanidad parecen sacrificables en beneficio de una selección que favorece a un sector humano digno de vivir sin límites. En el fondo ‘no se considera ya a las personas como un valor primario que hay que respetar y amparar, especialmente si son pobres o discapacitadas, si “todavía no son útiles” –como los no nacidos-, o si ‘ya no sirven’ –como los ancianos’”. Y añadió: “A nivel mundial solo un tercio de la población tiene el privilegio de tener abundancia de bienes, un tercio tiene lo suficiente y un tercio son los descartables que no cuentan ni para el consumo ni para el trabajo”.

“Como Pueblo de Dios que peregrina en el norte de Salta sabemos que nuestra gente sencilla cuida, valora y respeta la vida desde su inicio hasta su fin. En esta diócesis, que es una de las más pobres del país, la pandemia del Coronavirus nos ha mostrado las debilidades del sistema de salud que necesita ser mejorado en tantos aspectos: Infraestructura, equipamiento, personal de salud, medicamentos, por lo tanto los esfuerzos y recursos deberían priorizar para mejorar todo lo mencionado anteriormente y también, para subsanar la desnutrición infantil, enfermedades endémicas, viviendas apropiadas, trabajo digno, mejorar la educación en todos los aspectos, provisión de agua potable, instalación de cloacas, desarrollo sustentable de los recursos, en lugar de invertir recursos para impedir que criaturas inocentes vean la luz de la vida, lo que denota un terrible individualismo y hace evidente la cultura del descarte que impera en este mundo globalizado”, detalló.

Por eso, proclamó: “Abrazamos la vida en todas sus circunstancias y etapas, de principio a fin, abrazamos la vida como viene, cuando se concibe en condiciones planificadas, o no; en situaciones de vulnerabilidad, o no; proclamamos una vez más que 'Vale toda vida' y 'nadie se salva solo' como destacó el papa Francisco transmitiendo la urgente necesidad de fraternidad que atraviesa el mundo. La vida humana es inviolable y ningún ser humano puede ser jamás incompatible con la vida”, concluye el documento, pidiendo la intercesión de San Ramón Nonato, defensor de la vida.+