Jornada arquidiocesana de infancia y adolescencia misionera

El pasado domingo 26 de agosto se celebró en la arquidiócesis de Rosario la Jornada de la Infancia y Adolescencia Misionera (IAM). El encuentro tuvo lugar en la parroquia Nuestra Señora del Carmen, de la localidad de Pérez, a pocos kilómetros de Rosario. Niños y adolescentes de las parroquias de la arquidiócesis se encontraron desde la mañana, junto con sus coordinadores. Estaban presentes el asesor arquidiocesano, Pbro. Sebastián Amerise, el párroco del lugar, Pbro. Marcelo Porrini, los responsables de la IAM de Rosario y matrimonios integrantes de las "familias misioneras" de la arquidiócesis. La Jornada contó también con la presencia del arzobispo de Rosario, Mons. José Luis Mollaghan, quien celebró la misa.

Con el lema "¡De los niños y adolescentes del mundo, siempre amigos!", el pasado domingo 26 de agosto se celebró en la arquidiócesis de Rosario la Jornada de la Infancia y Adolescencia Misionera (IAM). El encuentro tuvo lugar en la parroquia Nuestra Señora del Carmen, de la localidad de Pérez, a pocos kilómetros de Rosario.

Niños y adolescentes de las parroquias de la arquidiócesis se encontraron desde la mañana, junto con sus coordinadores. Estaban presentes el asesor arquidiocesano, presbítero Sebastián Amerise, el párroco del lugar, presbítero Marcelo Porrini, los responsables de la IAM de Rosario y matrimonios integrantes de las "familias misioneras" de la arquidiócesis.

La Jornada contó con la presencia del arzobispo de Rosario, monseñor José Luis Mollaghan, quien en la homilía de la misa que presidió a las 11, centró la mirada del misionero de la IAM en Jesús Eucaristía, que enciende nuestra caridad en cada celebración de la Misa. Durante el día se llevaron a cabo con mucho entusiasmo diversas actividades, entre ellas la oración y reflexión, que se centraron sobre Oceanía.

El arzobispo se refirió a que los niños y jóvenes se deben sentir verdaderos colaboradores de la IAM, y rezar por los niños y niñas de los territorios de misión, porque creen en Jesús y quieren imitar por la fe, su bondad y solidaridad con los demás.

También se refirió a la historia de la IAM, que nació en 1843, y sobre el profundo don en la Iglesia que es la misión "ad extra. La IAM, dijo, es una obra de fe y misión que participa, junto a las demás áreas misioneras, en la importante tarea que le confía la Iglesia a través de las Obras Misioneras Pontificias. Expresó su gratitud al Señor por todo lo que la IAM hace a través de sus niños en la arquidiócesis y en el mundo, con los adolescentes y animadores, ya que por los misioneros llega a muchos lugares la persona de Jesús, y la IAM los acompaña con la oración. También la generosidad material de cada uno es una ayuda para esta Obra.

El Arzobispo hizo una recorrida por los lugares de misión de Oceanía, mostrando la importancia de conocer el llamado y el trabajo de los misioneros, también fuera de nuestro país y de nuestro Continente, el cual igualmente necesita misioneros para difundir la Palabra de Dios y la presencia redentora de Jesucristo. Esta mirada hacia Oceanía, dijo, "nos compromete a rezar por ese Continente, porque es en la oración y en el encuentro con Cristo cómo vamos a crecer en el deseo de misionar, rezando y ayudando a los misioneros".

Por último, monseñor Mollaghan agradeció a todos los participantes de la infancia y adolescencia misionera presentes en la Jornada, especialmente al Padre asesor y a la parroquia que nos recibió cordialmente, y pidió a la Virgen Madre y Reina del Rosario que "nos llene de esperanza, a fin de que tengamos nuestro corazón muy cerca de todos los niños y adolescentes del mundo con nuestra generosidad y amor que brota de la fe en Jesús. Recordemos que para ello debemos anunciar el Evangelio, es decir al mismo Señor, la persona de Cristo, el único Salvador".+ (Sebastián Amerise)