Israel busca limitar las celebraciones de la Pascua ortodoxa en Jerusalén

Los líderes de la iglesia en Jerusalén expresaron su enojo por la decisión de la policía local de limitar el número de fieles durante esas ceremonias.

El "rito del Fuego Sagrado" -un momento clave en las liturgias de la Pascua celebradas en el Santo Sepulcro por la Iglesia Ortodoxa de Jerusalén- este año corre el riesgo de verse perturbado por "medidas restrictivas irrazonables", impuestas por las fuerzas policiales israelíes. Por este motivo, el patriarcado ortodoxo griego de Jerusalén interpeló a las autoridades israelíes y pidió su intervención ,para permitir a los cristianos celebrar "libremente" las liturgias pascuales. 

Las iglesias que siguen el calendario juliano celebran la Pascua este año el domingo 16 de abril. Y habitualmente, en la víspera de Pascua, miles de cristianos se reúnen en la Basílica del Santo Sepulcro para participar en el rito prepascual del "Fuego Sagrado", que sigue siendo un acontecimiento esperado por las comunidades de las Iglesias ortodoxas y por las demás antiguas Iglesias orientales esparcidas por todo el mundo.

Este año, la policía israelí ordenó que solo 1800 cristianos ortodoxos y armenios puedan participar en el ritual, así como que estén presentes 200 agentes de las fuerzas de seguridad. Medidas definidas como "restricciones irrazonables" en un comunicado emitido por el "Comité de Statu Quo" del Patriarcado Ortodoxo Griego de Jerusalén, y compartido por la Custodia de Tierra Santa y el Patriarcado Armenio de la Ciudad Santa. 

"Después de muchos intentos hechos de buena voluntad -dice el comunicado- no hemos podido coordinarnos con las autoridades israelíes, que están aplicando restricciones irrazonables y sin precedentes al acceso al Santo Sepulcro, más que el año pasado".

La nota de prensa reafirma la intención de celebrar el rito según "las costumbres del statu quo" (las normas consuetudinarias que regulan la convivencia entre las diferentes comunidades de fe en Jerusalén), por lo que  “todos los que deseen adorar con nosotros están invitados a participar. Dicho esto, dejaremos que las autoridades hagan lo que les plazca". 

Durante el ritual del Fuego Sagrado, según la tradición, el patriarca ortodoxo griego de Jerusalén se abre paso entre la multitud reunida en el Santo Sepulcro y entra en el Edículo que, en el interior del Santuario, contiene los restos de una cueva venerada, al menos desde el siglo IV, como la tumba de Jesús. Allí, el patriarca ora solo, sosteniendo en la mano una lámpara que se mantuvo durante todo el año encendida, la cual se apaga antes del rito, y luego sale con la llama de la lámpara reavivada, según la tradición, por el "Fuego Sagrado" descendido del cielo. Los fieles corren a encender sus velas con la llama de la lámpara traída por el patriarca, y las llamas sacadas de allí también son enviadas por avión a las comunidades de las Iglesias ortodoxas y orientales de todo el mundo.+