Ferviente comienzo del Año Jubilar Teresiano en La Plata

Con una celebración eucarística presidida por el obispo auxiliar de La Plata, monseñor Nicolás Baisi, el monasterio Regina Martyrum y San José, de las monjas carmelitas descalzas, ubicado en calle 7 y 35, dio comienzo al Año Jubilar Teresiano, con motivo de los 500 años del nacimiento de santa Teresa de Jesús.

Con una celebración eucarística presidida por el obispo auxiliar de La Plata, monseñor Nicolás Baisi, el monasterio Regina Martyrum y San José, de las monjas carmelitas descalzas, ubicado en calle 7 y 35, dio comienzo al Año Jubilar Teresiano, con motivo de los 500 años del nacimiento de santa Teresa de Jesús. En la misa se agradeció, igualmente, que la madre María Amada de Jesús fuese elegida una vez más priora del monasterio.

En su homilía, monseñor Baísi recordó que santa Teresa, desde niña, buscó la "íntima y exclusiva unión con Dios", que se plasmó en su célebre frase "para siempre, siempre, siempre".

"Esto indica hasta qué punto ella anhelaba llegar a la eternidad. Que este año jubilar sea entonces una gran ocasión para profundizar en su espiritualidad; que tanto tiene para aportar hoy en la Iglesia", sostuvo el prelado, que celebra misa diariamente en el Carmelo platense, ante las monjas de clausura que allí residen. Durante la misa, les agradeció la entrega y el sacrificio, y afirmó que "es toda una gracia para la arquidiócesis contar con este convento".

Con el obispo auxiliar, concelebraron monseñor Raúl Gross, párroco de San Ponciano; el capellán del monasterio, fray Gustavo Mariucci; el confesor y director espiritual, presbítero Carlos Mattioda, y el presbítero Christian Viña, de la parroquia Sagrado Corazón de Jesús y Santos Mártires Inocentes, de Cambaceres. Sirvieron al altar los religiosos terciarios capuchinos recoletos de la parroquia Nuestra Señora del Rosario, de El Dique, y algunos seminaristas platenses.

El Año Jubilar Teresiano, declarado por el papa Francisco, comenzó este 15 de octubre por un año. Las carmelitas platenses han elegido como lema para su celebración una frase de Santa Teresa: "Vuestra soy, para vos nací, ¿qué mandáis hacer de mí?".

Teresa de Cepeda y Ahumada (Teresa de Jesús) nació en Ávila, el 28 de marzo de 1515, y murió en Alba de Tormes, Salamanca, en 1582. Fue beatificada por Pablo V en 1614, canonizada por Gregorio XV en 1622 y proclamada doctora de la Iglesia universal por Pablo VI en 1970.+