El Papa valora el apoyo de una fundación a la Guardia Suiza Pontificia
- 18 de enero, 2025
- Ciudad del Vaticano (AICA)
El pontífice recordó que desde hace 25 años apoya a los miembros del cuerpo pontificio y a sus familias, tanto durante sus años de servicio en el Vaticano como luego de su regreso a su país de origen.

El Papa Francisco recibió a los representantes de la organización que, desde hace 25 años, apoya a los miembros de la Guardia Suiza y a sus familias.
En efecto, la Fundación de la Guardia Suiza Pontificia trabaja en favor de las familias de los miembros de ese cuerpo militar, especialmente para "la educación y la formación de los niños en escuelas apropiadas", "proporciona los medios para garantizar, mejorar y actualizar la profesionalidad y los métodos de trabajo de los equipos y de las infraestructuras" y ofrece asistencia a quienes regresan a su país después de su experiencia en el Vaticano.
El pontífice les expresa su gratitud "por el generoso apoyo" de la Guardia Suiza Pontificia, con la esperanza de que puedan continuar su "apreciado" trabajo en el futuro.
En su discurso, Francisco destaca la importancia de la contribución de la Fundación "para que los guardias puedan desempeñar su valioso servicio del modo más eficaz y para el bien de todos", y subraya que la cooperación con la Guardia Suiza Pontificia "es ejemplar, porque demuestra que ninguna realidad puede avanzar sola."
"Todos debemos ayudarnos y apoyarnos unos a otros, y esto se aplica a vosotros, a las comunidades individuales, pero también a toda la Iglesia", sostiene.
La labor de la Guardia Suiza Pontificia
"Ayudar a la Guardia Suiza Pontificia significa apoyar al Sucesor de Pedro en su ministerio en la Iglesia universal", explica el Papa quien, agradeciendo a los guardias por su "fiel servicio", recomienda que el compromiso de la Fundación esté "siempre animado por un espíritu de fe y caridad".
Con el tiempo, el trabajo de la Guardia Suiza ha cambiado mucho, pero su finalidad sigue siendo siempre la de proteger al Papa. Esto significa, también, contribuir a la acogida de tantos peregrinos, venidos de todas partes del mundo, que desean encontrarse con él.
Francisco se centra, en broma, en esta última tarea de los guardias suizos, que interactúan a diario con cientos de personas de todo el mundo: "¡Se necesita paciencia y los guardias la tienen! Y eso tienen de bonito: repiten cosas, explican... Mucha paciencia. ¡Felicidades!"
En cuanto a los ámbitos en los que trabaja la Fundación de la Guardia Suiza Pontificia, el Papa se centra en la ayuda a las familias de los guardias casados ??y con hijos, que "han aumentado", y subraya que los hijos, que son "el bien de las familias, son de fundamental importancia para la Iglesia y la sociedad."
"Me gustan los guardias que se casan; e gusta que tengan hijos, que tengan una familia. Esto es muy importante, muy importante", agrega.
Luego, respecto de quienes regresan a sus países de origen al final de su trabajo en el Vaticano, Francisco confía que algunos de ellos conservan un vínculo particular con la Santa Sede.
"Tengo contacto con algunos de ellos, que permanecen muy, muy unidos con el Vaticano, con la Iglesia. A veces llaman por teléfono, o envían algo; cuando pasan por Roma, me visitan. Es un buen contacto el que tengo", concluyó.+