Jueves 21 de noviembre de 2024

El Papa a las familias: "La Iglesia está con ustedes y en ustedes"

  • 25 de junio, 2022
  • Ciudad del Vaticano (AICA)
El pontífice en la clausura del X Encuentro Mundial de las Familias elogió a las familias que usaron su libertad para amar a las personas pese al mundo caótico que propone el mundo actual.
Doná a AICA.org

“Que el Señor los ayude cada día a permanecer en la unidad, en la paz y en la alegría, mostrando a todos que Dios es amor y comunión de vida", expresó este sábado 25 de junio el papa Francisco durante la homilía de la misa celebrada en la Plaza de San Pedro y presidida por el cardenal Kevin Farrell, prefecto del Dicasterio para los Laicos, con la que se clausuró el X Congreso Mundial de las Familias que se lleva a cabo del 22 al 26 de junio de 2022 con el tema: “El amor familiar: vocación y camino de santidad”.

El Papa puso el acento en la riqueza de “experiencias, propósitos, sueños” pero también “las preocupaciones y las incertidumbres” que han experimentado por las miles de familias que participaron del Encuentro Mundial. 

Francisco señaló que "la Iglesia está con ustedes, es más, la Iglesia está en ustedes. De hecho, la Iglesia nació de una Familia, la de Nazaret, y está formada principalmente por familias. Que el Señor los ayude cada día a permanecer en la unidad, en la paz y en la alegría, mostrando a todos que Dios es amor y comunión de vida".

Durante su homilía, el Santo Padre hizo referencia al anhelo de libertad en la sociedad actual, que tiene que ver con cuestiones culturales, sociales o económicas, aunque, a juicio de Francisco, la mayor parte de las personas carecen de la libertad más importante, “la interior. La libertad que nos da Dios no es la falsa y vacía libertad del mundo, que en realidad es un pretexto para satisfacer los deseos carnales”.

En este sentido, el obispo de Roma instó a las familias a “no usar su libertad para ustedes mismos, sino para amar a las personas que Dios puso a su lado. En vez de vivir como “islas”, se pusieron al servicio los unos de los otros”, afirmó el pontífice y añadió que “la familia es el lugar del encuentro, del compartir, del salir de sí mismos para acoger a los otros y estar cerca de ellos. Es el primer lugar donde se aprende a amar”.

No obstante, Francisco advirtió que esta convicción no siempre se cumple en un mundo complejo como el actual, marcado por la precariedad y el caos que hace que los padres en muchas ocasiones se conviertan en seres “ansiosos, a otros sobreprotectores, y a veces termina incluso por impedir el deseo de traer nuevas vidas al mundo”.

Frente a estos factores desestabilizadores, el Papa llama a los católicos a defender la familia: “No dejemos que se contamine con los venenos del egoísmo, del individualismo, de la cultura de la indiferencia y del descarte, y pierda así su ADN que es la acogida y el espíritu de servicio”.

En este contexto, el Papa recordó que Dios ama a los jóvenes, pero no por ello los “preserva de todos los peligros, desafíos y sufrimientos. No es ansioso ni sobreprotector; al contrario, confía en ellos y llama a cada uno al alto sentido de la vida y de la misión”.

El pontífice recordó a los matrimonios que no hay nada más estimulante para los hijos “que ver a los propios padres vivir el matrimonio y la familia como una misión, con fidelidad y paciencia, pese a las dificultades, momentos tristes y las pruebas”.

El Santo Padre pidió a las familias que el amor entre sus miembros “sea siempre abierto, extrovertido, capaz de ‘alcanzar’ a los más débiles y a los heridos que encuentren a lo largo del camino; frágiles en el cuerpo y frágiles en el alma”.

“El amor, en efecto, también el familiar, se purifica y se refuerza cuando se da”, subrayó.

Finalmente, Francisco dijo que la Iglesia Católica está con las familias, “es más, la Iglesia está en ustedes”. “De hecho, la Iglesia nació de una Familia, la de Nazaret, y está formada principalmente por familias. Que el Señor los ayude cada día a permanecer en la unidad, en la paz y en la alegría, mostrando a todos que Dios es amor y comunión de vida”.+