Viernes 22 de noviembre de 2024

El cardenal Brenes pide ayuda para reconstruir la capilla incendiada

  • 13 de agosto, 2020
  • Managua (Nicaragua) (AICA)
En un mensaje a sus fieles, el arzobispo pidió ayuda para reconstruir la capilla de la Sangre de Cristo, incendiada el 31 de julio.
Doná a AICA.org

La arquidiócesis de Managua, en Nicaragua, a través de un mensaje de su arzobispo, cardenal Leopoldo José Brenes, solicita a los fieles ayuda para reconstruir la capilla de la Sangre de Cristo, incendiada el pasado 31 de julio.

Un texto publicado por la cuenta de Facebook de la arquidiócesis, informa que el arzobispo Metropolitano de Managua, “agradece a todas las personas que han manifestado su solidaridad por lo ocurrido en la Capilla de la Sangre de Cristo”.

Tras consultar a sus vicarios, el cardenal Brenes “pone a disposición de todos los fieles las cuentas bancarias en donde podrán apoyar a la reconstrucción y restauración de la capilla de la Sangre de Cristo en nuestra catedral de Managua”, continúa la publicación.

Igualmente, los fieles que deseen hacer su aporte de manera personal pueden llevarlo a la catedral de Managua y entregarlo únicamente a los sacerdotes Luis Herrera, Said Ruiz o a sor Karla Muñoz.

Finalmente, el mensaje incluye el agradecimiento del prelado a todos por “sus muestras de cercanía en estos momentos en que Dios nos invita a estar en permanente oración y unidad”.

La versión de los hechos, hasta el momento, es que un hombre fue presuntamente visto lanzando una bomba molotov en la capilla, de manera que el antiguo crucifijo del siglo XVII que se encontraba dentro de ella quedó destruido.

El papa Francisco expresó su cercanía al pueblo nicaragüense en el Ángelus del pasado 2 de agosto y en un mensaje al cardenal Brenes: “Querido hermano te acompaño en el dolor por este acto vandálico, estoy cercano a vos y a tu pueblo. Rezo por todos ustedes”.

Por su parte el obispo de Rockford, monseñor David J. Malloy, presidente del Comité Internacional por la Justicia y la Paz de la Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos, emitió una declaración condenando “el ataque sacrílego contra la catedral de Managua ocurrido el viernes 31 de julio”. 

“La Iglesia en los Estados Unidos apoya a los fieles nicaragüenses que siguen sufriendo y a todas las personas de buena voluntad que luchan por la paz y la reconciliación en Nicaragua”.

Del mismo modo, la presidencia del Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM) se unió también en solidaridad con la Iglesia de Nicaragua y demandó a través a las autoridades nacionales a esclarecer “este hecho de violencia, porque no se puede aceptar, de ninguna manera, venga de donde venga”.

El cardenal Leopoldo Brenes, calificó ese ataque realizado con bomba incendiaria como un ‘acto de terrorismo’. El objetivo aparente de la explosión, un crucifijo histórico fabricado en el siglo XVII, se ha convertido en una imagen conmovedora de la Iglesia del país, que sufre y ha resistido constantes ataques retóricos y físicos (tres en las últimas tres semanas) desde que intentó mediar por la paz en ese país en 2018. +