Casi un millón de peregrinos en la Fiesta de los mártires de Uganda
- 3 de junio, 2025
- Kampala (Uganda) (AICA)
Los peregrinos llegaron al santuario de Namugongo, desde las 19 diócesis ugandesas, pero también desde Kenia, Tanzania, RD del Congo, Ruanda y Sudán del Sur, incluso de afuera de África.

El Santuario de Namugongo, en Uganda, recibió hoy, 3 de junio, a un millón de peregrinos, quienes desde todas las diócesis ugandesas y países vecinos, acudieron al santuario, con motivo de la fiesta de los santos Carlos Lwanga y compañeros mártires, los conocidos Mártires de Uganda, verdadera semilla de la fe en este país africano.
La celebración de los Mártires de Uganda conmemora a los 22 mártires católicos que fueron asesinados por el rey de Buganda entre 1885 y 1887, y los de dos catequistas mártires asesinados en Paimol, al norte del país, en 1918. Cada año es una de las diócesis ugandesas, por turno, la que se encarga de toda la celebración, aportando su toque de originalidad. Este año fue la diócesis de Lugazi, en el este del país, quien se encargó de las celebraciones, coordinando a los voluntarios y cuidando que la jornada se desarrolle del modo más correcto posible.
La celebración de este año llevó por lema: "Oh Señor, permíteme ver de nuevo, yo, tu peregrino de la Esperanza", en alusión al año jubilar.
El millón de peregrinos llegó desde las 19 diócesis ugandesas, pero también de las vecinas Kenia, Tanzania, República Democrática del Congo, Ruanda y de Sudán del Sur, e incluso de fuera de África. Gran cantidad de ellos llegaron caminando, en muchos casos durante días, como ocurre año tras año con la diócesis ugandesa de Lira, situada a más de 300 kilómetros del santuario.
Este año participan también decenas de líderes de diversas confesiones cristianas, subrayando el carácter ecuménico de la peregrinación. Los santuarios católico y anglicano en Namugongo se alzan uno junto al otro, recordando que los mártires fueron asesinados juntos, pese a pertenecer a tradiciones distintas.
"Nuestros estilos de culto pueden variar, pero la fe compartida y la sangre de los mártires nos unen", explicó Peter Okumu, catequista del norte de Uganda.
Un millar de fieles comenzaron el 15 de mayo la peregrinación hospedándose cada día, a lo largo del recorrido, en parroquias, centros pastorales e instituciones religiosas. Los peregrinos dan gracias por la generosidad y la hospitalidad mostradas por muchísimas personas a lo largo de la ruta, que donan alimentos, frutas e incluso dinero para apoyar a los peregrinos.
La peregrinación a Namugongo simboliza la devoción y el arrepentimiento, y también busca elevar una súplica a la intercesión de los mártires por necesidades personales o familiares. Pero sobre todo es un camino de fe que incluye celebraciones eucarísticas diarias, adoración silenciosa y meditación ante el Santísimo Sacramento, la Coronilla de la Divina Misericordia y el rezo del Rosario.
Desde la canonización de los mártires, en 1964, los peregrinos no dejaron de aumentar, pero ya, al poco tiempo de su martirio, muchas personas comenzaron a pedir su intercesión. Fue en aquellos primeros años cuando un misionero holandés caminó con su joven comunidad cristiana hasta Namugongo y, tras celebrar una misa, erigió una cruz en el lugar, lo que daría comienzo "oficial" a las peregrinaciones a Namugongo.
Canonizados por el papa Pablo VI en 1964, los mártires de Uganda siguen siendo un referente de fe en África. San Juan Pablo II visitó Namugongo en 1993, y el papa Francisco celebró la misa en el santuario en 2015. En la actualidad, una basílica dedicada a los mártires preside el lugar donde san Carlos Lwanga fue quemado vivo el 3 de junio de 1886.+