Carta de Cáritas Argentina a los directores diocesanos
- 27 de junio, 2012
- Buenos Aires (AICA)
El presidente de Cáritas Argentina, monseñor Oscar Ojea, obispo de San Isidro, y el director nacional, Gabriel Castelli, enviaron una carta a los directores diocesanos de la organización caritativa de la Iglesia, a fin de precisar algunos aspectos que hacen al manejo de fondos, a raíz de la aceptación de la renuncia de monseñor Fernando Bargalló, quien condujo la entidad hasta noviembre de 2011. "Nos duele y preocupa que estos hechos pongan en tela de juicio el manejo responsable, serio y transparente de los fondos que administra Cáritas Argentina. Transparencia avalada, además, por una auditoria externa de nivel internacional completamente independiente", subrayaron. Informes: www.caritas.org.ar
Texto de la carta
En relación a los hechos por todos conocidos referidos a Mons. Fernando Bargalló, quien fuera Presidente de Cáritas Argentina hasta noviembre de 2011, difundidos a través de los medios de comunicación, compartimos con ustedes lo siguiente:
Queremos destacar que Mons. Fernando Bargalló desempeñó su cargo en Cáritas Argentina durante seis años con dedicación pastoral y compromiso personal, animando los procesos de trabajo de las comunidades y alentando el servicio a los más pobres desde el espíritu evangélico.
Valoramos y agradecemos su honestidad y hombría de bien en su servicio en estos años, su entrega generosa a la tarea de Cáritas y su compromiso con los más pobres. Rezamos y acompañamos a él y su diócesis en este momento doloroso.
Por otra parte, nos duele y preocupa que estos hechos pongan en tela de juicio el manejo responsable, serio y transparente de los fondos que administra Cáritas Argentina. Transparencia avalada, además, por una auditoria externa de nivel internacional completamente independiente.
En el actual contexto, es oportuno recordar que la Presidencia de Cáritas Argentina es una función ad - honorem por lo cual los obispos a cargo no perciben remuneración alguna y tampoco manejan los fondos de la institución.
Lamentamos profundamente las implicancias que esta situación está generando, y que ciertamente conmueve la vida de nuestra Iglesia en general y de Cáritas en particular.
Conforme al espíritu que anima nuestra tarea, queremos alentarlos a poner nuestra mirada en aquello que nos convoca: el servicio a los más necesitados. Pidiéndole a Jesús que siga animando nuestra misión.+
