Viernes 19 de abril de 2024

Acabar con la discriminación y violencia contra mujeres

  • 6 de julio, 2012
  • Ginebra (Naciones Unidas) (AICA)
El Observador Permanente de la Santa Sede ante la Naciones Unidas, en Ginebra, monseñor Silvano Tomasi, señaló, en su discurso durante la 20º sesión del Consejo de Derechos Humanos del organismo internacional, que "la violencia contra las mujeres sigue siendo una realidad ineluctable en muchos lugares" en donde con frecuencia reina la impunidad" y pidió trabajar incansablemente para eliminar todo tipo de discriminación y violencia contra las mujeres.
Doná a AICA.org
El Observador Permanente de la Santa Sede ante la Naciones Unidas, en Ginebra, monseñor Silvano Tomasi, señaló, en su discurso durante la 20º sesión del Consejo de Derechos Humanos del organismo internacional, que "la violencia contra las mujeres sigue siendo una realidad ineluctable en muchos lugares" en donde con frecuencia reina la impunidad" y pidió trabajar incansablemente para eliminar todo tipo de discriminación y violencia contra las mujeres.

La Santa Sede ?dijo el arzobispo-, reconoce esta triste realidad y recuerda por ello las palabras del papa Benedicto XVI: "Hay lugares y culturas en donde la mujer es discriminada o despreciadas por el solo hecho de ser mujer, donde se consuman actos de violencia contra ellas. Ante estos hechos graves y persistentes es aún más urgente el esfuerzo de los cristianos para que en todo lugar sean promotores de una cultura que reconozca a la mujer, en el derecho y en los hechos, la dignidad que le compete".

Prosiguió luego el representante pontificio señalando que "la Santa Sede subraya la importancia del papel de la mujer en la familia. La familia es la célula vital de la sociedad y las mujeres, que participan a la par del matrimonio como esposas y madres, son fundamentales para preservar la institución de la familia y así, de la sociedad".

Tras señalar que es esencial que los Estados trabajen para eliminar la discriminación monseñor Tomasi, dijo que "la impunidad judicial, las normas culturales y sociales que toleran la discriminación y no afrontan los actos violentos como el infanticidio de las niñas o el aborto selectivo basado en el sexo, deben ser afrontados y combatidos".

El prelado concluyó recordando que la delegación de la Santa Sede considera como "verdad intrínseca" que la dignidad del hombre es la misma que la de una mujer, y que las instituciones deben respetarla, y por lo tanto alienta "la necesidad de eliminar toda discriminación y violencia hacia las mujeres".+