Ante el proyecto de ley sobre el fin de la vida, los obispos llamaron a "no distorsionar la fraternidad" y dar prioridad a los cuidados paliativos.
"No puede haber derecho a suprimir una vida humana", expresó la Academia Pontificia para la Vida en un comunicado, ante la decisión del Congreso francés de incluir el "derecho al aborto".
La Conferencia Episcopal dice que el debate dejó fuera el tema del "apoyo a las mujeres que desean conservar a sus hijos" y la libertad de conciencia de los médicos.
El presidente Macron prometió que las obras estarían terminadas antes de los Juegos Olímpicos de Verano, a realizarse en París entre el 26 de julio y el 11 de agosto.