Luego que una "vidente", llamó a conseguir hostias consagradas y realizar "rituales de purificación", el episcopado llamó a los sacerdotes a defender la Eucaristía y preservarla de todo sacrilegio.
A través de una carta abierta dirigida al Pueblo de Dios, el presidente del episcopado peruano se manifestó ante la grave situación política en el país y el Ministerio Público.
En un violento atentado perpetrado por sujetos armados en la sede de la compañía minera La Poderosa, en la provincia de Pataz, al noroeste del Perú, fueron asesinados 10 trabajadores.
El presidente del Episcopado inició un proceso de escucha y de discernimiento con distintas personalidades y obispos, centrado en la actual crisis político-social del país y en pro del bien común.