Fue presidida por el presbítero Germán Maccagno, párroco del santuario de la Virgen de Río Blanco. "Esperemos que este lugar pase a ser significativo y emblemático para todos los jujeños", expresó.
El obispo de Jujuy animó a que Dios "nos lleve a hacer su voluntad y a ser testimonio transparente de su amor en nuestra vida, para que anunciemos la alegría de la Navidad".
El padre Aldo Ramos, capellán penitenciario, brindó su testimonio acerca de la evangelización en ese ámbito.
Fue recibida por el vicegobernador Carlos Haquim, empleados y autoridades de la institución gubernamental, quienes pidieron que la imagen de la Virgen visite sus lugares de trabajo.