"Que el tiempo de conversión de esta Cuaresma sea fruto de nuestra intimidad con Dios", deseó el obispo de San Luis al celebrar la misa del miércoles de Ceniza.
Con motivo de las fiestas de Navidad y fin de año, monseñor Gabriel Barba saludó a la comunidad diocesana y a los periodistas, y les agradeció por la tarea y el tiempo compartido.
"Debemos cuidarnos unos a otros, podemos ayudarnos a cargar la cruz o levantarnos si nos hemos caído. El llamado nos une", recordó a los sacerdotes en el santuario del Santo Cristo de La Quebrada.
En el santuario diocesano de Nuestra Señora del Rosario del Trono, el obispo de San Luis, monseñor Gabriel Barba, rezó el rosario pidiendo por el don de la lluvia y el cese del fuego en la zona.