Las pastorales arquidiocesanas de Barrios Populares y Drogadepencia rosarinas advierten sobre los "silencios" en distintos estamentos sociales y piden acciones "ágiles" a los poderes estatales.
Se refiere a diferentes capas que contribuyen al problema, y considera urgente que "Rosario se desangre menos". Asimismo, alerta sobre la "espiral de violencia" que implican 50 muertos en dos meses.
En un mensaje por los 250 años de la presencia de la Virgen del Rosario, lamentó el crecimiento de la violencia por el narcotráfico, y puso bajo el amparo de María a las familias y las vocaciones.
Miles de fieles participaron de la marcha por las calles rosarinas que concluyó con un festival en el Monumento a la Bandera, donde el padre Pepe Di Paola invitó a decirle no a las drogas.