En un segundo comunicado, los prelados condenaron enérgicamente los hechos de violencia que acabaron con la vida de un policía, quemado vivo por manifestantes en la región de Puno.
En otro acto de persecución hacia la Iglesia católica, fue enviado a juicio el obispo de Matagalpa, acusado de conspirar en contra del régimen de Daniel Ortega.
"No permitamos que el Perú sea destruido por nuestras acciones o caiga en un abismo institucional", expresaron en un comunicado.
En Asamblea Plenaria, del 7 al 12 de enero, los prelados profundizarán sobre los desafíos que presenta la realidad del país a la Iglesia en Venezuela, su análisis y acciones pastorales.