El padre John Ubaechu se dirigía al retiro anual de sacerdotes cuando lo capturaron. Fue en el estado de Ilmo y el mismo día en que la policía logró la liberación del padre Stephen Echezona.
El padre Philip Ekweli, que había sido secuestrado con el occiso, fue liberado. "Nadie está seguro en el Estado de Edo", denunció el Obispado de Auchi.
Esos datos se desprenden del análisis realizado por el Secretariado Católico de Nigeria (CSN), que recogió datos sobre los secuestros de sacerdotes nigerianos en el período 2015-2025.
El padre Sylvester Okechukwu, párroco de Santa María Tachira, ubicada en el Estado de Kaduna, fue brutalmente asesinado un día después de haber sido secuestrado.