Mons. Giobando, en la procesión náutica con la imagen de San Salvador

El futuro obispo participó de la Fiesta de los Pescadores. Oró por quienes arrojan sus redes al mar, dejó una ofrenda floral en el monumento alusivo y rezó por los 44 tripulantes del ARA San Juan.

El obispo electo de Mar del Plata, monseñor Ernesto Giobando SJ, encabezó la 97ª procesión náutica de esa ciudad, junto a la imagen de San Salvador, patrono de la colonia pesquera.

La clausura de los festejos en honor del patrono de los pescadores fue el 26 de enero y estuvo organizada por la Sociedad de Patrones Pescadores, la Comisión de Festejos de San Salvador y la parroquia Sagrada Familia y San Luis Orione, en el marco de la 43ª Fiesta Nacional de los Pescadores.

Monseñor Giobando estuvo acompañado por el párroco de la Sagrada Familia, Miguel Cacciutto, y el presidente de la Sociedad de Patrones Pescadores, Vicente Galeano.

Amenizaron los festejos la Banda de Música del Área Naval Atlántica, de la Armada Argentina.

En esta edición, la imagen del santo patrono fue acompañada por cientos de fieles, que recorrieron a pie la calle Magallanes e hicieron una parada en la Prefectura Naval Argentina. Allí, el administrador apostólico bendijo a la institución y oró por el personal que custodia el mar y cuida a los pescadores.

En el Monumento al Pescador, se depositó además una ofrenda floral para recordar a los fallecidos durante su labor en el mar.

Luego la peregrinación ingresó a la Banquina,  para embarcarse en las lanchas y realizar la tradicional procesión náutica.

A bordo del buque pesquero Don José, la imagen de San Salvador recorrió las aguas y participó del homenaje a los fallecidos en el mar. Posteriormente, se ingresó a la Base Naval, sede del Comando del Área Naval Atlántica de la Armada Argentina.

Con la recepción del personal de la Fuerza de Submarinos, mientras el trompa ejecutaba el toque de silencio, se arrojó una corona de laureles añ agua, en memoria de los 44 tripulantes del submarino ARA San Juan.

Ya en tierra, el administrador apostólico bendijo los frutos y los aparejos de pesca.

Mensaje a la comunidad pesquera
Para cerrar los festejos, monseñor Giobando dio gracias por esa fiesta, que "remueve los sentimientos más hondos de nuestra fe cristiana y de esta comunidad portuaria".

"Hace 97 años que nuestros padres y abuelos se animaron a trabajar en este puerto y, desde ese primer momento, pusieron sus sueños y sus anhelos en la Sagrada Familia que trajo san Luis Orione", destacó, y profundizó: "Familias enteras han vivido y viven de los frutos del mar, pescadores artesanales que buscan el pan de sus mesas con el sudor de sus frentes; no hay otro camino para la dignidad humana que el trabajo, y las condiciones indispensables para que ese trabajo traiga crecimiento y paz social".

"Damos gracias también porque se ha resuelto el conflicto que privaba de la salida a pescar, y eso trae esperanza, mientras no se haga una pesca que deprede nuestra riqueza ictícola, tan abundante pero no ilimitada. Cuidemos la Creación, no como dueños, sino como administradores", agregó.

El futuro obispo diocesano rezó para que "sean preservadas las fuentes de trabajo" y rogó a san Salvador que siga acompañando, para que nadie les robe la esperanza a los trabajadores del sector.

"En este Año Jubilar, Año Santo de la Esperanza, el Papa nos invita a seguir siendo 'Peregrinos de esperanza', que como ancla del alma nos guía en el camino hasta el Cielo, ese Cielo donde ya están nuestros seres queridos y, especialmente, los que han quedado en alta mar. Roguemos por ellos", invitó.

Por último, monseñor Giobando se dirigió a los pescadores: "Queridos trabajadores del Puerto de Mar del Plata, no se cansen de echar las redes, y traigan a nuestras mesas y hogares el fruto de sus esfuerzos".+