Miércoles 4 de diciembre de 2024

Un seminarista nicaragüense fue ordenado sacerdote para la Iglesia en Corrientes

  • 3 de diciembre, 2024
  • Corrientes (AICA)
Jesús Israel Luna Soza recibió el presbiterado por la imposición de manos del arzobispo local, Mons. Andrés Stanovnik, durante la misa presidida por el prelado en el santuario de la Virgen de Itatí.
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La Iglesia de Corrientes cuenta, desde el sábado 30 de noviembre, con otro sacerdote, luego de que el arzobispo local, monseñor Andrés Stanovnik OFM Cap, ordenara presbítero ese día a Jesús Israel Luna Soza, durante la celebración eucarística celebrada en la parroquia y santuario de Nuestra Señora de Itatí.

Concelebraron varios sacerdotes y estuvieron presentes fieles de la comunidad, familiares del neosacerdote, religiosos y religiosas, junto a representantes de instituciones educativas.

Jesús Israel es oriundo de Nicaragua, se formó en el seminario mayor arquidiocesano internacional y misionero Redemptoris Mater de Corrientes y es alumno egresado del Instituto Filosófico y Teológico Santo Toribio de Mogrovejo, de Resistencia. Desde hace algún tiempo, realiza tareas pastorales en la parroquia Virgen de Itatí.

El arzobispo señaló en la homilía: "Tu vida cristiana fue madurando en la comunidad del camino y, también en ese contexto, fue descubriendo y discerniendo su llamado al ministerio sacerdotal. La comunidad cristiana es el lugar donde el Señor te llama a vivir la fe, que siempre es servicio".

"Podríamos decir que la comunidad del camino fue el ángel de la anunciación, que el Señor utilizó como instrumento para que nuestro candidato al ministerio sacerdotal llegara a este momento y se disponga, como María de Nazaret, a lo que Dios quiera de él", manifestó.


"Vas a cumplir -dijo el prelado- con el ministerio de enseñar en nombre de Cristo, el maestro. Anuncia a todos los hombres la palabra de Dios que vos mismo recibiste con alegría, medita la ley del Señor, cree lo que lees, enseña lo que crees y practica lo que enseña; que tu doctrina sea un alimento sustancioso para el pueblo de Dios, que la fragancia espiritual de tu vida sea motivo de alegría para todos los cristianos, a fin de que con la palabra y el ejemplo construyas ese edificio viviente, que es la Iglesia de Dios".

Monseñor Stanovnik le recordó al ordenando que también le corresponderá la función de "santificar en el nombre de Cristo y, por tu ministerio, el sacrifico espiritual de los fieles alcanzará su perfección al unirse al sacrificio del Señor, que por tus manos se ofrecerá incruentamente sobre el altar, en la celebración de la Eucaristía".

Finalmente, pidió a Israel que recuerde que "fue elegido entre los hombres y puesto al servicio de los hombres en las cosas que se refieren a Dios", animándolo a "congregar a los fieles en una sola familia".

El sacerdote eligió como lema: "Señor, tu lo sabes todo, tu sabes que te quiero. Jesús dijo: apacienta mis ovejas".+