Sábado 20 de abril de 2024

Un nuevo sacerdote fue secuestrado y otro liberado en Nigeria

  • 25 de noviembre, 2022
  • Abuja (Nigeria) (AICA)
Nuevo secuestro de un sacerdote con un grupo de fieles en el Estado de Nasarawa, mientras que fue liberado otro sacerdote caprturado la semana pasada en el Estado de Enugu.
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El padre Peter Ochang, párroco de la iglesia San Esteban en la Misión Católica Romana (RCM) en la diócesis de Ogoja, en el estado de Cross River, fue secuestrado en una zona aún indefinida del estado de Nasarawa, junto con varios miembros de la Sociedad de San Judas. 

Tal como informa la agencia Fides el sacerdote y un número sin definir de miembros de la Sociedad de San Judas se dirigían ayer, 24 de noviembre, a Abuja para asistir a unos actos eclesiásticos cuando fueron atacados y llevados por la fuerza al monte.

La noticia de su secuestro fue dada a conocer hoy, 25 de noviembre, durante la misa matutina por el padre Fidelis Kajibia, administrador de la catedral de San Benedicto, Igoli Ogoja y confirmada posteriormente por el presidente del Consejo Diocesano de Educación de la diócesis de Ogoja, Peter Nandi Bette, en su página de Facebook.

Las autoridades policiales de ambos estados aún no hicieron ninguna declaración sobre el secuestro.

Mientras tanto, la Agencia Fides recibió la noticia de la liberación del padre Victor Ishiwu, párroco de la Iglesia de San Judas en Eburummiri, Ibagwa-Aka, área de gobierno local de Igbo-Eze South del Estado de Enugu, que fue secuestrado en las primeras horas del sábado 19 de noviembre, mientras oficiaba las oraciones de adoración.

“El padre Victor fue liberado en el monte hace dos días”, dijo a la Agencia Fides el padre Benjamin Achi, director de comunicaciones de la diócesis de Enogu. “Goza de buena salud”, añadió.

Según los testimonios recogidos, los secuestradores irrumpieron en el lugar de adoración pasada la medianoche y comenzaron a disparar al aire. El padre Ishiwu, junto con los fieles, había logrado escapar y esconderse en diferentes lugares.

Sin embargo, los bandidos, que hablaban inglés pidgin y lenguas fulani, siguieron al clérigo hasta la casa parroquial y lo amenazaron con quemar las instalaciones de la parroquia si se negaba a salir, y luego irrumpieron en la rectoría y secuestraron al sacerdote por la fuerza.+