Jueves 21 de noviembre de 2024

Obispos españoles piden que hospitales católicos sean "zonas libres de eutanasia"

  • 25 de junio, 2021
  • Madrid (España) (AICA)
El secretario general de la Conferencia Episcopal Española dijo que espera que se respete la objeción de conciencia de los centros sanitarios ante la entrada en vigor de la ley de suicidio asistido.
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El secretario general de la Conferencia Episcopal Española, monseñor Luis Argüello, expresó su confianza en que se respete la objeción de conciencia en su sentido más amplio a partir de la entrada en vigencia de la ley de eutanasia en España, y reclamó que los hospitales y residencias de titularidad eclesial sean consideradas “zonas libres de eutanasia”.

El también obispo auxiliar de Valladolid deseó que se respete la decisión de las entidades “en cuyo ideario y en cuya puerta de entrada se dice a los que entran: ‘Este es un lugar donde se ponen por delante los cuidados, una zona libre de eutanasia’”.

El prelado hizo estas afirmaciones durante la rueda de prensa al terminar una reunión de la Comisión Permanente de los obispos españoles.

Monseñor Argüello subrayó que la ley sobre el suicidio asistido es una “mala noticia”, al tomarse en cuenta “la experiencia de otros países de Europa”.

Asimismo, advirtió sobre el riesgo de que personas u organizaciones puedan considerar a estas personas una “carga para la familia” y esto devenga en más peticiones de eutanasia.

“Provocar la muerte no puede ser nunca una referencia social para evitar el sufrimiento”, aseveró.

Frente a este panorama, el obispo dijo que confía en que “se respete la decisión de los sanitarios de objeción de conciencia”, así como de las instituciones que decidan no aplicar la llamada ley de muerte digna, así como de las personas que se encuentren atendidos en los centros católicos.

La Conferencia Episcopal Española cree que es momento de que “crezca en España un movimiento fuerte de promoción de la defensa de la vida y de los cuidados paliativos”.

En este sentido, alienta la promoción de los llamados testamentos vitales o “declaraciones anticipadas” para poder exigir, no solo que no se practique la eutanasia, sino también recibir “una atención médica y espiritual en los momentos finales de la vida”.+