Jueves 28 de marzo de 2024

Mons. Zecca descansará en la catedral tucumana, como era su voluntad

  • 11 de noviembre, 2022
  • San Miguel de Tucumán (AICA)
Los restos mortales de Mons. Zecca serán trasladados a San Miguel de Tucumán y sepultados a los pies del Sagrado Corazón de Jesús, en la catedral arquidiocesana
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Los restos mortales del sexto arzobispo de Tucumán y obispo titular de Bolsena, monseñor Alfredo Horacio Zecca, quien falleció el 4 de noviembre en Buenos Aires, serán trasladados a San Miguel de Tucumán y velados en la catedral de Nuestra Señora de la Encarnación, el sábado 12 de noviembre.

En un comunicado, el arzobispado de Tucumán invitó a la comunidad a participar de las ceremonias, especialmente a los sacerdotes del presbiterio arquidiocesano y a los diáconos; a las superioras y superiores de comunidades de vida consagrada; a los directivos de organismos, movimientos, asociaciones laicales y establecimientos educativos católicos; así como a maestras y profesores de religión.

Los restos mortales del prelado, arzobispo de Tucumán entre 2011 y 2017, serán velados en la catedral local desde las 9 hasta las 12.30, momento en el que obispos y miembros del clero ofrecerán una misa de exequias por el difunto.

El actual arzobispo de Tucumán, monseñor Carlos Alberto Sánchez presidirá la misa, que será concelebrada por el obispo auxiliar de la arquidiócesis, Roberto José Ferrari; el cardenal Luis Héctor Villalba, arzobispo emérito de Tucumán; monseñor Armando José María Rossi OP, obispo emérito de Concepción; monseñor Jose Antonio Díaz, obispo de Concepción y el obispo emérito de Santiago del Estero, monseñor Francisco Polti Santillán.

Tras la concelebración eucarística, los restos de monseñor Zecca serán sepultados a los pies del Sagrado Corazón de Jesús, dentro del recinto sagrado de la catedral, tal como era su deseo personal.

Monseñor Zecca había llegado a Tucumán luego de una vasta vida sacerdotal dedicada a la educación y, en sus años allí -destacaron quienes compartieron con él su tarea apostólica- realizó una gran labor en ese sentido. A la vez, sus experiencias en la provincia calaron hondo en el arzobispo. “No sólo voy a extrañar Tucumán cuando no esté; voy a pedir que me entierren aquí”, dijo monseñor Zecca en su última entrevista con La Gaceta de Tucumán.

Cuando se supo de su fallecimiento, monseñor Sánchez confirmó que el objetivo era cumplir su deseo, y que su morada final sería la catedral metropolitana de Tucumán.+