Jueves 28 de marzo de 2024

Mons. Ojea en Santa Rita: "Hospitalidad, comunión y misión"

  • 21 de mayo, 2018
  • San Isidro (Buenos Aires) (AICA)
Con el lema "Renovados por el amor de Jesús", la comunidad parroquial de Santa Rita de Casia, en Boulogne, diócesis de San Isidro, celebró la fiesta en honor de su patrona. La celebración central estuvo presidida por el obispo, monseñor Oscar Ojea, que en su homilía recordó: "El amor es la herencia de Jesús".
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El obispo de San Isidro, monseñor Oscar Ojea, presidió la misa en el marco de las fiestas patronales en honor de Santa Rita de Casia, en la localidad bonaerense de Boulogne, que llevaron el lema "Renovados por el amor de Jesús".

En la homilía, el obispo advirtió que la fiesta de Santa Rita se celebra muy cerca de Pentecostés, en que los cristianos celebramos la herencia de Jesús. "El amor es la herencia de Jesús", afirmó.

En el marco de la venida del Espíritu, el obispo preguntó: "¿Qué significa para un santuario como Santa Rita recibir al Espíritu Santo? ¿Qué nos pide el Espíritu Santo a una parroquia que tiene la singularidad que es santuario, que recibe todos los 22 a muchísima gente, que se esmera por atender, por escuchar, por acercar una bendición? ¿Qué es lo primero que nos pide el amor de Dios ,el Espíritu Santo? Lo primero es la hospitalidad, la virtud de la hospitalidad, que es una virtud tan escasa en nuestra cultura".

En ese sentido, consideró que "el santuario nos ofrece una extraordinaria oportunidad para recibir, para acoger, para hacer lugar, para escuchar, para mirar a los ojos; para hacer algo que no se reemplaza con ningún teléfono móvil, con ninguna imagen, con ningún mensajito de whatsapp, que es la presencia, el encuentro rostro a rostro, el papa Francisco diría ?cuerpo a cuerpo?. Esa escucha directa del hermano con su angustia, con su necesidad, con su esperanza, con su deseo de compartir esto que es irreemplazable entre los seres humanos: el encuentro rostro con rostro, la posibilidad de mirar a los ojos y de dejarnos interpelar, y de animarnos a hacerlo y de no tener que estar mediatizándolo continuamente con imágenes, como si el encuentro no existiera o estuviera muy lejano", expresó.

"El santuario nos da el espacio y el don del espíritu para poder ejercer la hospitalidad como virtud cristiana esta es la casa de todos, esta es tu casa, aquí tienes tu espacio, tu lugar, tu escucha, tu hermano, y se pone a tu disposición", continuó.

En segundo lugar, el obispo consideró que en la procesión "El Espíritu nos pedía a nosotros, santuario de Santa Rita, vivir en comunión. Ya algo propio del Espíritu es hacer puentes", señaló
"¿Cómo construir la comunidad? ¿Cómo construir puentes entre nosotros? En el santuario le pedimos particularmente al Espíritu que nos enseñe a construir puentes y a ser nosotros puentes para que los hermanos puedan encontrarse, escucharse, sanar heridas, reconciliarse", continuó.

"Lo tercero que el Espíritu nos pide, como me parece que nos están pidiendo a toda la Iglesia, es la misión de perder miedo a salir de nosotros mismos, perder miedo a comunicar el Evangelio que nos cambió la vida", afirmó monseñor Ojea.

"Vamos a pedirle al Espíritu Santo el coraje necesario para ser auténticos misioneros, perder todo miedo cuando se trata de anunciar la verdad del Evangelio, anunciar aquello que creemos más allá de las dificultades que vamos encontrando en el camino por la cultura que estamos viviendo, por la atmósfera que vamos respirando, pero no fallarle a la verdad del Evangelio y menos cuando el Espíritu nos impulsa y nos anima a anunciar", sostuvo.

Finalmente, y sumado a la hospitalidad, la comunión y la misión, el prelado llamó a, "en un momento tan particular en nuestra Patria, en nuestro país, pedirle al Espíritu Santo que podamos afirmar, cuando se discuta el tema sobre la vida, el valor del significado de la vida humana, y podamos afirmar nuestra hospitalidad esencial: recibir la vida es la hospitalidad básica del ser humano, es como decirle a la vida ?yo no soy el único privilegiado sino que deseo que todos los que son invitados al banquete de la vida puedan disfrutar de él?", manifestó.

"Mi misión como ser humano es construir un mundo más justo, más equitativo, más noble, más humano, más solidario, más fraterno, para que los chicos que estén llamados a venir a este mundo y a esta Argentina puedan venir. Esa es la hospitalidad básica", insistió. "Que el Señor nos ilumine e ilumine a nuestros legisladores. En este día especial del Espíritu vamos a pedirle junto a nuestra patrona Santa Rita por estas intenciones que hemos expresado: ser cada día más hospitalarios en todo sentido, sabiendo recibir a todos los hermanos, vivir en profunda comunión y ser corajudos para anunciar el Evangelio en este momento", concluyó.+