Mons. Caride: 'Que María nos enseñe a descubrir la alegría'
- 13 de febrero, 2025
- San Isidro (Buenos Aires) (AICA)
"La alegría es algo que se recibe, la alegría nos viene y nos toma, y María nos dirá que la alegría viene de Dios", dijo el obispo de San Isidro, en la fiesta de la Virgen de Lourdes.
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Con el lema "María, soñamos una comunidad misionera, inclusiva y alegre", la parroquia Nuestra Señora de Lourdes, de Béccar, en la diócesis de San Isidro, celebró sus fiestas patronales con una misa presidida por el obispo local, monseñor Guillermo Caride, y concelebrada por el párroco, presbítero Guido Borella, el vicario parroquial, presbítero Hugo Álvarez, y el párroco de Nuestra Señora de la CAVA, presbítero Lucas Schcolnik, quien asistió a la ceremonia junto a un grupo de su comunidad.
En su homilía, monseñor Caride manifestó: "En primer lugar, nos dirigimos a la Virgen, para que María nos enseñe a descubrir la alegría, porque la alegría es algo que se recibe, la alegría nos viene y nos toma. No es algo que hoy decidí estar alegre, no: la alegría nos viene y nos viene de afuera, y María nos dirá que la alegría viene de Dios".
"Dios es causa de alegría en el corazón. Dios siempre quiere sembrar la alegría en nuestro corazón, cuanto más nos entregamos a confiar en Dios, más crecemos y permanecemos en la alegría", agregó.
Aseguró, en ese sentido, que la alegría "no es un estado de ingenuidad frente a los problemas, las dificultades, la enfermedad, la muerte. Muchas veces, estas situaciones despiertan otra cosa en nosotros, la angustia. Me angustia la posibilidad de la enfermedad, lo que pueda pasar con mi enfermedad. Me angustia saber que está llegando la muerte. Es entonces cuando el acto de confianza en Dios nos hace levantar y recibir la alegría, y la alegría nos llega a través de la cercanía".
El prelado afirmó que "es la cercanía lo que construye la comunidad. Cuando compartimos la vida, cuando me siento incluido, cuando me siento escuchado, cuando alguien me acompañó en determinado momento, cuando reflexionamos juntos, cuando rezamos juntos, cuando compartimos la Eucaristía, cuando soñamos juntos que otro mundo es posible, cuando tenemos fiesta, que es la expresión de la alegría".
Al finalizar la celebración, y como parte de los festejos, se presentaron grupos musicales y se realizó una cena comunitaria.+