Jueves 28 de marzo de 2024

Mons. Marino: "La Cuaresma es un tiempo de conversión"

  • 11 de febrero, 2016
  • Mar del Plata (Buenos Aires)
Monseñor Antonio Marino, obispo de Mar del Plata, presidió la misa del miércoles de ceniza, con la cual los católicos comienzan el tiempo de Cuaresma, que son cuarenta días de preparación hacia la Pascua. Durante la homilía, señaló que "La Cuaresma es un tiempo favorable, tiempo de salvación en que Dios quiere obrar en nosotros una purificación un aumento de gracia porque nuestra vida es como un peregrinar".
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En la noche del 10 de febrero, monseñor Antonio Marino, obispo de Mar del Plata, presidió la misa del miércoles de ceniza, con la cual los católicos comienzan el tiempo de Cuaresma, que son cuarenta días de preparación hacia la Pascua. Como es tradición después de la homilía, se bendijeron las cenizas y los cientos de fieles presentes en la misa se acercaron al comulgatorio, para que los marcaran con la cruz.

"Comenzamos este tiempo sagrado de Cuaresma, como preparación espiritual a la gran solemnidad de la Pascua, con la cual los cristianos queremos renovar profundamente nuestras vidas de comunión con Cristo. El tiempo de Cuaresma es un tiempo de conversión, de volver. Esto significa que el hombre ha extraviado su camino y que en poco o en mucho, emprendemos senderos que están equivocados. Hay que tomar consciencia y volver al origen, manifestar al Señor el deseo que queremos perseverar en sus sendas", comenzó diciendo el obispo en su homilía, y añadió "volver al Señor de todo corazón. Por eso en el salmo 50 oíamos decir ´Dios mío, crea en mi un corazón puro´, para volver al Señor desde lo profundo, desde y con todo el corazón, para tener un interior totalmente entregado a Dios. Esto no es cuestión solamente de quererlo o de esfuerzo humano por supuesto que tenemos que colaborar con Dios, cuya gracia pedimos, es un clamor. ´¡Dios mío crea en mí un corazón puro!´. Somos conscientes que sin su gracia no logramos agradarle".

"La Cuaresma es un tiempo favorable, tiempo de salvación en que Dios quiere obrar en nosotros una purificación un aumento de gracia porque nuestra vida es como un peregrinar. Le pedimos al Señor esta gracia de dejarnos purificar con el programa de cuaresma que escuchamos en el evangelio: ayuno, la limosna y la oración", explicó monseñor Marino.

Finalmente, el prelado señaló: "En minutos, haremos un gesto penitencial de bendecir las cenizas que pondremos en la frente. Esto nos recuerda nuestro origen, somos hechos por Dios del polvo de la tierra y hacia Él vamos. Escuchamos esta monición, ´conviértete y cree en el Evangelio. Que nos acerquemos a recibir esta señal con consciencia, con un corazón abierto, con el deseo de una profunda purificación para llegar a celebrar con un corazón agradecido y exultante la Pascua del Señor".+