Jueves 21 de noviembre de 2024

Mons. Lozano: Tres caminos concretos para el encuentro con Dios

  • 17 de diciembre, 2018
  • San Juan
El arzobispo de San Juan de Cuyo, monseñor Jorge Eduardo Lozano, recordó las tres indicaciones concretas que hizo Juan el Bautista para preparar el corazón para el encuentro con Dios: "Servir a los pobres, no pedir a los demás nada por encima de sus posibilidades y no abusar del poder o autoridad que uno pueda tener", puntualizó.
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"Cuando nos dicen ?tengo dos noticias para darte, una buena y otra mala, ¿por cuál querés que empiece??, nos gustaría que solamente nos contaran la existencia de la que resulte mejor, y la peor se hubiera esfumado. Pero la vida no es así. Está compuesta de unas y otras. Y aunque nos cueste y reneguemos de la realidad, ella es lo que es", reflexionó el arzobispo de San Juan de Cuyo, monseñor Jorge Eduardo Lozano.

El prelado recordó que "los profetas son enviados por Dios para hacer llegar sus mensajes, que pueden ser de consuelo y liberación, o de sufrimientos a causa del pecado del pueblo. Juan el Bautista tuvo la misión de ser el puente entre el Antiguo y el Nuevo Testamento".

"Fue el encargado de señalar el cumplimiento de las promesas de Dios, y señaló a Jesús como el Mesías esperado desde todos los siglos. Por medio de su predicación en el desierto alentaba al pueblo a preparar el corazón para el Encuentro con Dios", puntualizó.



El arzobispo citó tres indicaciones bien concretas que hace Juan como respuesta a la pregunta: ¿qué tenemos que hacer? Lo primero, indicó, es mirar a los demás y compartir. "A los que cobraban impuestos para el Imperio Romano, les pidió que no exigieran de más", y completó con lo que les ordenó a los que tienen algún tipo de autoridad o poder: "No extorsionen a nadie, que no se abusen de su fuerza o lugar en la sociedad".

"¡Qué caminos tan concretos! Servir a los pobres, no pedir a los demás nada por encima de sus posibilidades y no abusar del poder o autoridad que uno pueda tener", sintetizó.

"No son mandatos rebuscados. No digo que sean sencillos. Pero están al alcance de todos, siempre y cuando nos abramos a la gracia de Dios. Para ello es necesario dejar de lado actitudes individualistas y egocéntricas, reconociendo nuestras limitaciones", subrayó.