Domingo 24 de noviembre de 2024

Mons. Conejero marcó sueños, sentimientos y acciones del caminar diocesano

  • 7 de enero, 2022
  • Formosa (AICA)
El obispo de Formosa detalló que para 2022 son estos: "la esperanza, la alegría, la unidad, el servicio, la paz y, sobre todo, el amor, a ejemplo de Jesús, que nos amó hasta el extremo".
Doná a AICA.org

El obispo de Formosa, monseñor José Vicente Conejero Gallego, señaló que en el año que comienza se proseguirá Etapa Diocesana de escucha y consulta, iniciada el pasado 17 de octubre, del itinerario del Sínodo 2021-2023: Por una Iglesia sinodal: Comunión, Participación y Misión.

“Seguiremos esforzándonos, con la ayuda del Espíritu Santo, por favorecer, en nuestra diócesis de Formosa, ‘una comunión más profunda, una participación más plena y una misión más fructífera’. Tendremos que asumir nuevas actitudes de mayor ‘humildad y diálogo, superando la plaga del clericalismo y el virus de la autosuficiencia y procurando también evitar las trampas y escollos del pesimismo, del conflicto y la división’”, puntualizó citando el Vademécum para el Sínodo.

En su primer editorial en el periódico diocesano Peregrinamos, el prelado recordó que “el papa Francisco, por su parte, en la Jornada Mundial de Oración por la Paz, nos invitaba a todos, y de modo particular a los gobernantes, a reflexionar y actuar sobre la educación, el trabajo y el diálogo entre generaciones, elementos importantes y actuales para una paz de los pueblos sostenible y duradera”.

“El lema pastoral diocesano que nos acompañará, Dios mediante, a lo largo de este 2022, y que dimos a conocer en la solemnidad de la Inmaculada Concepción de la Santísima Virgen María, el pasado 8 de diciembre en el Anfiteatro de la Juventud, reza así: ‘Tus palabras y gestos, tu amor inmenso, Señor Jesús, permanecen para siempre’; quiere ser una respuesta, una profesión de fe a la iniciativa del amor infinito de Dios a los hombres, manifestado en su Hijo Jesucristo, nuestro único Salvador”, sostuvo.

Monseñor Conejero Gallego indicó, además, que el Calendario Pastoral de este año, marca tres desafíos de la Primera Asamblea Eclesial de América Latina y el Caribe “priorizando, de esta manera, objetivos y acciones en nuestra común tarea evangelizadora” y destalló: 

  • El encuentro personal con Jesucristo… ÉL, pues sin el Señor Jesús, Camino, Verdad y Vida, la Roca y Fundamento, en quien reside toda la Plenitud, no pasa nada.
  • La Iglesia, Pueblo de Dios, a la luz de la Palabra y del Vaticano II: es decir, nosotros, que hemos de renovarnos y convertirnos constantemente al servicio de la humanidad.
  • Acompañar a los pueblos originarios: ellos, defendiendo su vida y cultura; y en ellos, a los más pobres, vulnerables, sufrientes y descartados.

“La ministerialidad de la Iglesia se realiza y visibiliza, en nuestra diócesis, en los jóvenes y adultos que, voluntariamente, acceden a los diversos ministerios al servicio de la comunidad”, aseguró.

“La esperanza, la alegría, la unidad, el servicio, la paz y, sobre todo, el amor, a ejemplo de Jesús, que nos amó hasta el extremo sean los sueños, los sentimientos y acciones que nos acompañen en el caminar juntos de este Nuevo Año 2022”, concluyó.+

» Texto completo del editorial