Lunes 11 de noviembre de 2024

Mons. Barba: "Celebramos la vida de Dios, manifestada en las distintas formas de Vida Consagrada"

  • 9 de septiembre, 2022
  • San Luis (AICA)
El obispo de San Luis llamó a vivir un discipulado a través de una "genuina y auténtica cercanía con Dios por medio de una vida de espiritualidad profunda" y que "supere la mera religiosidad".
Doná a AICA.org

En el Día de la Vida Consagrada y el nacimiento de la Virgen María, el miércoles 8 de septiembre se realizó una jornada de reflexión y oración en el seminario San José y San Miguel de la diócesis de San Luis, que convocó a miembros de la vida consagrada de la diócesis.

Acompañados por seminaristas, miembros de los Consejos Evangélicos diocesanos, consagradas, consagrados y laicas consagradas, el obispo diocesano, monseñor Gabriel Bernardo Barba presidió la Eucaristía, en donde los presentes hicieron la renovación de sus votos.

En la homilía, monseñor Barba expresó que “en esta fiesta celebramos también la vida de Dios, manifestada en las distintas formas de Vida Consagrada”. “Ustedes fueron llamados para dar testimonio con su vida de la Buena Nueva…, de una nueva lógica para la humanidad a través de los Consejos Evangélicos, que se hacen carne en la realidad, a través de los diversos carismas de los distintos institutos y formas de vida”, continuó.

Asimismo, el prelado manifestó que “necesitamos tener una genuina y auténtica cercanía con Dios por medio de una vida espiritual profunda, que supere la mera religiosidad. Que vaya más allá de la práctica religiosa. Que lleve a una profunda intimidad con Dios. Con el Amado. Manifestada en la cercanía de ser discípulos de Cristo”.

Monseñor Barba invitó a los presentes a profundizar “la humanización de las estructuras de nuestra vida religiosa”, y “lo mismo digo para las otras formas de vida consagrada. A fin de llegar a ser mejores testigos y radicalmente hermanos y hermanas en el verdadero amor. Resignificando nuestros espacios, lugares y formas en las que viven sus particulares carismas”.

Finalmente, manifestó que “debemos aprender que este discipulado se dará desde una sana humanidad y no simplemente desde un mero ejercicio intelectual o de una opción moral”.

» Texto completo de la homilía