Martes 19 de marzo de 2024

Mons. Aspiroz: "El Señor y la Virgen del Milagro llegan a tantos rincones de la patria"

  • 16 de septiembre, 2021
  • Bahía Blanca (Buenos Aires) (AICA)
La arquidiócesis de Bahía Blanca celebró al Señor y la Virgen del Milagro con una misa presidida por el arzobispo y una procesión por las calles de Punta Alta.
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En la festividad del Señor y la Virgen del Milagro, la arquidiócesis de Bahía Blanca se unió a la celebración en la parroquia María Auxiliadora, de Punta Alta. La misa fue presidida por el arzobispo, Fray Carlos Aspiroz Costa OP y concelebrada por el párroco, el presbítero Cesar Luciano Cardozo.

En su homilía, monseñor Aspiroz señaló sobre la devoción que comenzó en el pueblo salteño: “Es bello como esta devoción tan profunda crece y se extiende a tantos rincones de la Patria y más allá porque el misterio de Cristo revela la anchura y profundidad del misterio de Dios”.

Al referirse al momento actual de pandemia, el prelado bahiense sostuvo: “Vivimos un largo tiempo, lo vivimos como cruz que nos hace preguntarnos cosas tan profundas que nos ayudan a ir más allá. Esta pandemia nos ha manifestado la fragilidad el temor, nuestra pequeñez que hacen que miremos al Señor del Milagro y a la Virgen de una manera renovada”. 

Monseñor Azpiroz remarcó que el sentido de la celebración trasciende la historia salteña: “El momento oportuno es la Pasión y la Virgen al pie de la cruz salvando al pueblo de Salta, pero ya no solo a este pueblo. Por eso lo celebramos aquí hoy, en el sur bonaerense”. 

En ese sentido, profundizó sobre la Pasión de Jesús: “Este misterio de la iniquidad y de la libertad a la vez nos enseña a ser verdaderos Señores de las cosas. Dominando la creación, no arruinándola. No enseña a ser señores de la creación, hermanos uno de otros e hijos de Dios”. 

“Jesús iba a morir para reunir a todos los hijos dispersos, y esa figura de Cristo crucificado del Milagro no fue solo para salvar a Salta del terremoto, sino que ahora comprendemos su sentido más profundo”, agregó.

Para cerrar, el prelado destacó las virtudes que surgen de reflexionar sobre la veneración de la imagen. En primer lugar, mencionó “la palabra perseverancia que viene de severus. Nosotros le tenemos miedo a la palabra severidad, pero el origen de ese concepto es firmeza, no enfado. Es el que tiene una palabra firme, el que te dice ‘esto es en serio, no en serie’". 

En segundo lugar, monseñor Azpiroz resaltó la virtud de la constancia “que viene de constar, estar, no moverse”. Y especificó: “Sobre todo esto lo vemos en la figura de María. Estaba la Madre doliente de pie, firme”.

Finalmente, subrayó la paciencia “porque la pasión que manifiesta esta imagen que es la pasión de Cristo”. En tanto, señaló a los presentes: “Imagino que los que están con la bandera es porque manifiestan pasión por el Señor y la Virgen los milagros” y continuó: “Pasión indica padecer, saber padecer sin lamentarse. Fuerza, deseo. ‘Para esto he venido’, dice Jesús”. 

Por último, el arzobispo de Bahía Blanca recordó la frase de Cristo: “Cuando yo sea levantado en alto, atraeré a todos hacia mí”. Y concluyó rezando: “Tu eres nuestro y nosotros somos tuyos. Y en el tiempo de las preguntas acerca de la fragilidad, nos damos cuenta de que tú eres el Buen Pastor porque así manifiestas la cercanía de Dios, la compasión de Dios y sobre todo -por eso estamos aquí- su ternura”.

Al concluir la celebración, los fieles caminaron en procesión detrás de la imagen del Señor y la Virgen del Milagro.+