Viernes 29 de marzo de 2024

Los gitanos son uno de los grupos más vulnerables a las nuevas formas de esclavitud

  • 5 de junio, 2014
  • Ciudad del Vaticano
Al recibir en audiencia a los participantes del encuentro "La Iglesia y los gitanos- anunciar el Evangelio en las periferias", organizado por el Pontificio Consejo de la Pastoral de los Emigrantes e Itinerantes, Francisco llamó a encontrar políticas y estrategias pastorales para enfrentar las -nuevas formas de persecución, opresión e, incluso, de esclavitud- y advirtió que los gitanos son uno de los grupos más vulnerables a las formas de esclavitud modernas-
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El papa Francisco pidió un nuevo enfoque en el ámbito civil, cultural y social y también en la estrategia pastoral de la Iglesia para combatir las nuevas formas de persecución, de opresión y a veces de esclavitud, para hacer frente a la situación de los gitanos en el mundo.

Lo hizo durante la audiencia concedida esta mañana a los participantes del encuentro mundial "La Iglesia y los gitanos: anunciar el Evangelio en las periferias", organizado por el Pontificio Consejo de la Pastoral de los Emigrantes e Itinerantes.

El pontífice dijo que el tema de la reunión corresponde ´´a la memoria de una relación entre la comunidad eclesial y el pueblo gitano, a la historia de un camino para conocerse, para encontrarse y, además, a los retos de hoy, un reto que concierne a la pastoral ordinaria y también a la nueva evangelización´´.

Asimismo, recordó que a menudo los gitanos se encuentran al margen de la sociedad y a veces hasta ´´se les mira con hostilidad y sospecha´´; además ´´están escasamente involucrados en las dinámicas políticas, económicas y sociales del territorio´´. Sabemos, prosiguió, que se trata de ´´una realidad compleja pero, ciertamente, también el pueblo gitano está llamado a contribuir al bien común y esto es posible con itinerarios adecuados de corresponsabilidad, en la observancia de los deberes y en el respeto de los derechos de cada uno´´.

Al referirse a las causas actuales de las situaciones de miseria en varios sectores de la población, Francisco advirtió sobre la carencia de estructuras educativas para la formación cultural y profesional, la dificultad de acceso a la asistencia sanitaria, la discriminación en el mercado del trabajo y la falta de viviendas decentes, y subrayó que si estas plagas del tejido social afectan a todos, ´´los grupos más débiles son los que con más facilidad se vuelven víctimas de nuevas formas de esclavitud´´ porque ´´ de hecho son las personas menos tuteladas las que caen en la trampa de la explotación, de la mendicidad forzada y de diversas formas de abuso. Los gitanos se encuentran entre los más vulnerables, sobre todo cuando no hay ayudas para la integración y la promoción de la persona en las diversas formas del vivir civil´´.

El Papa indicó que es aquí donde se inserta la solicitud de la Iglesia ya que ´´el Evangelio es, efectivamente, anuncio de alegría para todos y de forma especial para los más débiles y marginados. A ellos estamos llamados a garantizar nuestra cercanía y nuestra solidaridad siguiendo el ejemplo de Jesucristo que testimonió que son los predilectos del Padre´´. Pero es necesario que, junto a esta acción solidaria en favor del pueblo gitano, ´´esté también el empeño de las instituciones locales y nacionales y el sostén de la comunidad internacional para individuar proyectos e intervenciones destinadas a mejorar la calidad de vida´´.

Por último, Francisco animó al Pontificio Consejo a proseguir su tarea sin desalentarse y rogó para que "los gitanos encuentren en ustedes hermanos y hermanas que los aman con el mismo amor con el que Cristo amó a los marginados. Sean para ellos el rostro acogedor y alegre de la Iglesia".+