Viernes 26 de abril de 2024

La mujer que luchó por su derecho a llevar una cruz al cuello

  • 27 de mayo, 2013
  • Madrid (España) (AICA)
La Fundación Ayuda a la Iglesia Necesitada otorgó a Nadia Eweida, azafata de la aerolínea British Airways, el Premio a la Defensa de la Libertad Religiosa en el Mundo. El galardón se entregó el pasado 10 de mayo, en el marco de la III Jornada de Libertad Religiosa, que tuvo lugar en el aula magna de la Universidad CEU San Pablo de Madrid. Nadia Eweida es una cristiana copta del Reino Unido cuyo caso cobró especial relevancia cuando, el pasado enero, el Tribunal Europeo de Estrasburgo dictó sentencia a su favor en la demanda interpuesta a British Airways al haberla despedido por llevar una cruz en el cuello.
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La Fundación Ayuda a la Iglesia Necesitada otorgó a Nadia Eweida, azafata de la aerolínea British Airways, el Premio a la Defensa de la Libertad Religiosa en el Mundo. El galardón se entregó el pasado 10 de mayo, en el marco de la III Jornada de Libertad Religiosa, que tuvo lugar en el salón de grados de la Universidad CEU San Pablo de Madrid.

Nadia Eweida es una cristiana copta del Reino Unido cuyo caso cobró especial relevancia cuando, el pasado enero, el Tribunal Europeo de Estrasburgo dictó sentencia a su favor en la demanda interpuesta a British Airways al haberla despedido en el año 2006 por llevar una cruz en el cuello.

Tras realizar un curso sobre "Dignidad y seguridad" para que los empleados, según relató, "conocieran las diferentes culturas y aprendieran a respetarse unos a otros", al regresar al día siguiente, su jefe le pidió que se quitara el crucifijo y ella respondió: "Es un símbolo que representa lo que soy". Finalmente, fue despedida.

La aerolínea británica alegaba que llevar un crucifijo perjudicaba la imagen de la empresa. Sin embargo, los magistrados entendieron que no se respetó un "justo equilibrio entre, por un lado, el deseo de la demandante de manifestar su fe y poder comunicársela a los demás, y por otro, respetar la imagen de la marca".

En una sesión con periodistas, enseñando la pequeña cruz que motivó su despido, Nadia Eweida manifestó que el motivo de su conducta fue "vivir el primer mandamiento y mantenerse firme en este camino".

Tras unos meses recurriendo a los tribunales, la sentencia la dictó el Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo siete años después de su despido y fue readmitida. "Dios respondió a mis oraciones, reivindicando los derechos de los cristianos en el Reino Unido y en Europa", dijo, aunque matizó que "no me siento un héroe". "Desde la sentencia de Estrasburgo he tenido a Dios de mi lado y me ha proporcionado equipos legales que me han estado ayudando. Ha habido una intervención sobrenatural en cada paso dado", aseguró, al tiempo que admitió que "hay un profundo desconocimiento en occidente del significado de la cruz".

"No voy a ocultar mi creencia en el Señor Jesús", había manifestado a los medios de comunicación la ex azafata en 2006, después de su despido. "British Airways le permite a las musulmanes usar un velo, a las Sikhs llevar un turbante y a otras creencias atuendos religiosos. Sólo los cristianos tenemos prohibido expresar nuestra fe", denunció, al referirse a la política que obligaba a los empleados a usar los crucifijos sólo debajo del uniforme. "Soy una empleada leal y consciente de British Airways, pero defiendo los derechos de todos los ciudadanos".

El ejemplo de Nadia Eweida manifiesta la defensa del derecho de ciudadanía de los principios cristianos en el ámbito público y civil. Un derecho que es de justicia reivindicar tanto en sociedades occidentales, que se autodenominan tolerantes, como en otras donde la libertad religiosa está en la vanguardia de la reivindicación de los derechos humanos más fundamentales.+