Miércoles 15 de enero de 2025

La comunidad venezolana celebra a la Divina Pastora en Caballito

  • 15 de enero, 2025
  • Buenos Aires (AICA)
La parroquia de Caacupé se colmó los fieles reunidos para honrar a esa advocación mariana el 14 de enero, en una misa llena de simbolismo y esperanza para la diáspora del país sudamericano.
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La comunidad venezolana colmó el templo de la parroquia santuario Nuestra Señora de Caacupé, en el barrio porteño de Caballito (avenida Rivadavia 4879), el martes 14 de enero, para honrar a la Divina Pastora, advocación de la Virgen María muy querida en Venezuela, donde Suele congregar multitudes.

Ofició la misa el párroco, presbítero Eusebio Hernández, quien exhortó a los fieles reunidos a pedir a la Divina Pastora la gracia de la esperanza en este año jubilar 2025. Ese templo es uno de los lugares donde puede ganarse la indulgencia del jubileo, con las condiciones adecuadas (hacer allí un momento de meditación, pedir por las intenciones del Santo Padre, recitar el Credo, rezar un Padrenuestro, Avemaría y Gloria, confesarse y comulgar en días próximos a la visita o el mismo día).


El párroco animó a buscar aliento y consuelo en la Divina Pastora, que lleva a su Hijo Jesús, cuida de su rebaño y reúne a su pueblo en medio de las dificultades (aludiendo al pueblo de la diáspora). Llamó a no permitir que la desesperanza entre en el corazón, a no bajar los brazos y quedarse al costado del camino, ya que la Divina Pastora dice que su Hijo puede hacer más liviana la piedra más pesada y nos abre las puertas del cielo.

En las ofrendas, junto al pan y el vino, se acercaron al altar algunos alimentos típicos del país caribeño, una bandera venezolana y otra argentina, todo lo cual fue depositado al pie de la imagen de la Divina Pastora, que estaba colocada bajo un palio, a la derecha del presbiterio. Multitud de flores blancas ornaban el altar, el sitial de la Divina Pastora y los costados de los bancos, transmitiendo el sentido de una fiesta hondamente sentida.


La imagen habitual tenía desde ese día un nuevo báculo, una corona y un sombrero, hechos por el presbítero Juan Cruz Padilla, orfebre, que también hizo una nueva corona para el Niño Jesús. Tres días antes, ese sacerdote, que atiende confesiones en Caacupé los domingos, había celebrado en esa iglesia una misa por su 80º cumpleaños.

Un buen grupo de hombres y mujeres lucía remeras blancas que en el frente llevaban la imagen de la Virgen, teniendo a sus costados los colores amarillo, azul y rojo de la bandera venezolana (con estrellas) y los colores celeste y blanco de la bandera argentina (con el sol).

Las remeras decían "Cofradía Divina Pastora. Parroquia de Caacupé" y, en la espalda, se leía el lema "Con María caminamos en comunión".

Al finalizar la misa, hubo vivas a la Divina Pastora, y el párroco, de rodillas, al igual que todos los asistentes, rezó una breve invocación ante la imagen de la Virgen.

Era una tarde muy calurosa, y, además de los ventiladores del templo, algunos asistentes se refrescaban con abanicos. Un coro con instrumentos siguió interpretando himnos religiosos luego de la celebración litúrgica.

Simultáneamente, en el mismo barrio de Caballito, en el santuario Nuestra Señora de los Dolores (avenida Díaz Vélez 4860), el párroco, padre Mariano Zordán M.SS.CC., de la congregación de Los Misioneros de los Sagrados Corazones de Jesús y de María, ofició también una misa con la imagen de la Divina Pastora, para los fieles venezolanos que acuden a ese templo.


Marcha de la esperanza a la catedral
Por otra parte, el domingo 19, a las 9, se celebrará una misa en la misma parroquia Nuestra Señora de Caacupé, luego de la cual la imagen de la Divina Pastora será llevada en procesión por las calles hasta la catedral de Buenos Aires.

El arzobispo local, monseñor Jorge García Cuerva, ha invitado a participar del acontecimiento en un video: "Junto con toda la comunidad venezolana, el próximo domingo 19 de enero, vamos a celebrar a la Divina Pastora de Venezuela. A las 9 de la mañana, celebración de la Eucaristía en la parroquia de Caacupé, y luego, por primera vez, habrá una marcha de la esperanza, acompañando a la colectividad venezolana, hasta la catedral de Buenos Aires. Están todos invitados. Que Dios los bendiga y que la Divina Pastora interceda por toda la comunidad venezolana".+