Felicitaciones de monseñor Margni por el campeonato de Lanús
- 24 de noviembre, 2025
- Avellaneda (Buenos Aires) (AICA)
El obispo de Avellaneda-Lanús felicitó al club Atlético Lanús por su consagración en la Copa Sudamericana 2025, resaltando las virtudes del deporte que se reflejan en el club.
El obispo de Avellaneda-Lanús, Marcelo Margni, felicitó al Club Atlético Lanús por ganar la Copa Sudamericana 2025, destacando la alegría que el deporte genera en la comunidad y la importancia de la fraternidad, el trabajo en equipo y la superación, extendiendo su saludo a jugadores, dirigentes, cuerpo técnico, socios y simpatizantes.
En su saludo, publicado el 23 de noviembre, el obispo enfatizó que este triunfo puede ser una oportunidad para "fortalecer la comunidad a través de la unión, la amistad social y la esperanza".
Asimismo, resaltó las virtudes del deporte que se reflejan en el club, como "la fraternidad, el trabajo en equipo y la búsqueda del bien común".
Monseñor Margni vinculó la victoria con los valores promovidos por el papa Francisco, viendo en el triunfo "un signo de unidad, amistad social y esperanza compartida".
Por último, hizo un llamado a la comunidad para que "la alegría del campeonato sirva para seguir construyendo espacios comunitarios de encuentro, vínculos sanos y gestos de fraternidad que fortalezcan a la ciudad".
Texto del mensaje de Mons. Margni
Al señor presidente y a los miembros de la Honorable Comisión Directiva del Club Atlético Lanús
Queridos dirigentes, jugadores, cuerpo técnico, trabajadores, socios, simpatizantes y vecinos y vecinas de la querida ciudad de Lanús:
Como obispo de la diócesis de Avellaneda-Lanús, deseo expresarles mi sincera y profunda felicitación por el reciente triunfo que ha consagrado al Club Atlético Lanús como campeón de la Copa Sudamericana 2025, título obtenido ayer 22 de noviembre de 2025, tras vencer por penales a Atlético Mineiro. Este logro es motivo de orgullo para todos los que aman con pasión al querido Granate.
Este título, alcanzado con entrega, disciplina y espíritu de equipo, es fruto de una larga tradición de trabajo serio, de esfuerzo constante y de una identidad deportiva que honra a toda la comunidad de Lanús.
Quiero saludar especialmente:
- a la dirigencia, por la responsabilidad con la que conducen la vida institucional;
- a los jugadores y al cuerpo técnico, cuya dedicación, humildad y perseverancia se reflejan en este campeonato;
- a los trabajadores y trabajadoras del club, que sostienen con compromiso cada actividad, muchas veces desde tareas silenciosas e invisibles;
- y de un modo muy cercano, a los socios y simpatizantes, que viven este logro como un motivo de unión y orgullo comunitario.
Permítanme dirigir una palabra particular a los abuelos y abuelas granates, algunos ya con muchos años de fidelidad al club, que han seguido este torneo desde sus casas, muchas veces festejando junto a sus hijos, nietos y bisnietos. Su memoria, su transmisión de valores, su amor por la camiseta y su constancia a lo largo de décadas forman parte esencial del patrimonio espiritual y comunitario de Lanús. En ustedes se refleja la historia viva del Club Atlético Lanús.
Como pastor de esta porción de la Iglesia, me regocijo profundamente con ustedes. Celebro la alegría genuina que brota del deporte cuando expresa lo mejor de nuestras comunidades: la fraternidad, el trabajo en equipo, la búsqueda del bien común y la capacidad de superación. Son virtudes que el papa Francisco -quien tanto valoró el lugar del deporte en la cultura del encuentro- nos ha recordado en numerosas ocasiones, invitándonos a ver en cada victoria un signo de unidad, de amistad social y de esperanza compartida.
Pido al Señor que este momento de felicidad para toda la familia granate sea también una oportunidad para seguir construyendo espacios comunitarios de encuentro, vínculos sanos y gestos de fraternidad que fortalezcan a toda la ciudad de Lanús.
Que Dios los bendiga abundantemente, y que la Virgen de Luján los acompañe con su protección materna.
Con afecto en el Señor.+
