Miércoles 24 de abril de 2024

Emoción en Añatuya tras la consagración de un nuevo diácono

  • 8 de abril, 2013
  • Los Juríes (Santiago del Estero)
La comunidad de Los Juríes, en el departamento santiagueño de General Taboada, acompañó el viernes 5 de abril la ordenación diaconal de José Vera, quien recibió el primer grado del Orden Sagrado de las manos del obispo de Añatuya, monseñor Adolfo Uriona FDP, quien presidió la celebración en compañía de una veintena de sacerdotes de la Iglesia diocesana y del clero tucumano, y cientos de fieles que colmaron la Plaza San Martín, pulmón de la ciudad. El obispo emocionó a todos los presentes al relatar que la joven vocación proviene de una familia numerosa y de bajos recursos, que en edad temprana perdió a su madre y que pudo progresar en el camino de discernimiento de su vocación gracias al apoyo permanente de sus familiares.
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La comunidad de Los Juríes, en el departamento santiagueño de General Taboada, acompañó el viernes 5 de abril la ordenación diaconal de José Vera, quien recibió el primer grado del Orden Sagrado de las manos del obispo de Añatuya, monseñor Adolfo Uriona FDP, quien presidió la celebración en compañía de una veintena de sacerdotes de la Iglesia diocesana y del clero tucumano, y cientos de fieles que colmaron la Plaza San Martín, pulmón de la ciudad.

La celebración religiosa fue seguida con atención en todo el pueblo, ya que se trata de la primera vocación surgida de esta localidad de no más de 5.000 habitantes, y que debe su nombre al pueblo originario que habitaba esas tierras, ubicadas a 280 kilómetros de la capital provincial. "Es la primera vez en la historia de esta ciudad que acontece un hecho tan trascendental y religioso", recordaron desde la organización de la misa.

Monseñor Uriona transmitió en su homilía la unidad del texto de los Hechos de los Apóstoles y el servicio a lo más pobres y necesitados, ya sea en las "antiguas formas" de pobreza, o en sus "nuevas" formas, como la droga, la violencia, el creciente desamparo, el maltrato y el abuso de niños y adolescentes.

El obispo diocesano invitó al neodiácono a "arremangarse y trabajar" por los hermanos más postergados, para luego reflexionar acerca del evangelio de la pesca milagrosa: "Si tienes muchas noches sin pesca? deberás mirar más allá del acontecimiento que se cierre sobre vos, hacia la orilla, porque allí estará Jesús para decirte donde tirar los redes".

"Allí estará Jesús, esperando con el fuego preparado, como símbolo de oración, para compartir momentos intensos de ?pescado asado? o de ?mateadas?. En este momento sentimos la presencia del papa Francisco, quien nos habló de una Iglesia pobre y para los pobres", agregó.

Asimismo, monseñor Uriona emocionó a todos los presentes al relatar que la joven vocación proviene de una familia numerosa y de bajos recursos, que en edad temprana perdió a su madre y que pudo progresar en el camino de discernimiento de su vocación gracias al apoyo permanente de sus familiares.

La celebración terminó con un fraternal brindis y una cena. Numerosos grupos de cantores de Quimili, Añatuya, Bandera y Los Juríes dieron al encuentro una renovada alegría.+