El Papa se reunió con su familia piamontesa en Asti

Poco antes del mediodía del sábado, Francisco inició una visita privada a su prima que vive en Portacomaro, con motivo de su 90 cumpleaños. También visitó a otros primos y parientes.

El papa Francisco viajó este fin de semana a la provincia piamontesa de Asti, en el norte de Italia, para visitar a sus familiares y celebrar la Jornada Mundial de la Juventud a nivel diocesano en la catedral local.

Un helicóptero transportó al pontífice al campo de deportes de Portacomaro Stazione, donde poco antes del mediodía fue recibido por el párroco del pueblo, el padre Luigino Trinchero. Mientras se dirigía en auto a visitar a su familia, centenares de personas se agolparon a lo largo de la carretera para saludarlo y captar los primeros momentos de una visita estrictamente privada.

El pontífice reservó todo el sábado a los afectos familiares. Uno de sus primos, quien lo recibió a su llegada, recordó las cartas, los encuentros que tuvo en el Vaticano y una llamada telefónica sorpresa que recibió en Navidad el año pasado y que le acercó la esperanza del abrazo que ahora se hace realidad.

Francisco se dirigió luego a visitar a su prima Carla Rabezzana, quien acaba de cumplir 90 años y a la que no veía desde hace 3 años. Durante la comida, en la que participarán otros primos de la familia, el obispo de Roma comió “Bagna Cauda”, su plato favorito -típico del Piamonte- preparado con anchoas, aceite y ajo y utilizado como salsa para las verduras.

También se encontró con otra prima, Delia Gai, quien vive con más parientes en Tigliole. “Hace tiempo que quería pasar unas horas con mis parientes en los lugares de mi familia”, explicó el pontífice.

“Antes de ser Papa iba a menudo a la zona de Asti, era una costumbre: cuando llegaba a Roma como provincial de los jesuitas de la Argentina, o como arzobispo para asistir a algún sínodo” recordó, y añadió: “En todas las ocasiones iba al Piamonte a ver a los primos de papá. Estamos muy unidos”.

Su prima Carla ya había anticipado el encuentro, asegurando que lo abrazaría “porque no nos vemos desde hace tres años, desde finales de 2019, antes de la pandemia, cuando fui con familiares al Vaticano”. “Y luego charlaremos, como hacemos al menos una vez al mes por teléfono, como parientes que se quieren. Le preguntaré por su rodilla, que ahora le duele. Me habla de ello cuando hablamos por teléfono”, añadió.

El domingo a la mañana, Francisco presidió una misa en la catedral de Asti. Será el primer momento público del Papa en Piamonte, con motivo de la Jornada Mundial de la Juventud diocesana.+