El Papa felicita a los impulsores del Pacto Educativo Africano

África tiene "todo lo que necesita para ser un continente capaz de trazar los caminos del futuro", en particular en materia de educación, dijo el Papa a los impulsores del Pacto Educativo Africano,

El Papa recibió en el Vaticano en la mañana de hoy, 1º de junio, a una delegación de la Fondation Internationale Religions et Sociétés, entidad promotora del Pacto Educativo Africano, iniciativa que ha sido fruto de un Simposio Internacional celebrado en noviembre en Kinsasa (capital de la República Democrática del Congo), bajo el patrocinio de la Conferencia Episcopal del Congo y organizado por la citada fundación y la Universidad Católica del Congo.

El Pacto Educativo Mundial, presentado por el Papa Francisco en septiembre de 2019, ya está disponible a nivel local en el continente africano, por lo cual expresó su regocijo el Santo Padre al inicio de esta audiencia.

Se trata de movilizar culturas particulares, en las que la "dimensión comunitaria de la educación" es significativa, como resume este proverbio citado por el Papa: "Para educar a un niño, se necesita todo un pueblo". De hecho, prosiguió Francisco, "cada niño no es responsabilidad exclusiva del padre y de la madre, sino de todos los miembros de la comunidad".

Asociarse con los gobiernos locales
El Pacto Educativo Africano quiere “fortalecer esta dimensión comunitaria y horizontal de las relaciones”, pero también pretende “poner de relieve la otra dimensión, la vertical, igual de antigua” en este continente: la relación con Dios. África es, “actualmente, el continente que está experimentando el mayor aumento en el número de cristianos y católicos”, señaló el Santo Padre.

También es “el continente más joven del mundo”, subrayó. “Los invito a escuchar la voz de los jóvenes y sus ideas, sin autoritarismos: el Espíritu también habla a través de ellos, y estoy seguro de que sabrán sugerir cosas bellas y sorprendentes”.

Este dinamismo demográfico y eclesial es un llamado a “invertir las mejores energías” en la educación de los jóvenes. “Ahora es el momento de trabajar con los gobiernos locales para la cualificación cada vez mayor de la educación, sobre todo formando bien a los docentes, valorándolos y creando las condiciones necesarias para el ejercicio digno de su profesión”, advirtió el Santo Padre.

Arraigado para dar fruto
Luego se refirió a este estímulo para mirar a África “con mucha confianza, porque tiene todo lo necesario para ser un continente capaz de trazar los caminos del futuro”. Francisco citó los “valores de la educación tradicional africana, en particular los de hospitalidad, acogida y solidaridad”, “que encajan perfectamente en el Pacto Educativo”. 

Y añadió: “El cristianismo se pone de acuerdo con lo mejor de cada cultura y ayuda a purificar lo que no es auténticamente humano, y por tanto ni siquiera divino”, y recordó que muchos filósofos y pedagogos africanos también ofrecen un ejemplo a seguir, citando a Nelson Mandela o al siervo de Dios y ex jefe de Estado tanzano Julius Nyerere.

El Pacto Educativo Africano es “una novedad que se desarrolla a partir de dos grandes raíces”, comentó luego: “la cultura tradicional y la fe cristiana”, que confirman su solidez.

“Espero que el Pacto Educativo Africano sea seguido también por los demás continentes”, deseó finalmente el Santo Padre ante la delegación.+