Viernes 26 de abril de 2024

El Card. Turkson instó a los movimientos populares a promover la integración en la sociedad

  • 10 de julio, 2021
  • Ciudad del Vaticano (AICA)
El prefecto del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano e Integral intervino en el IV Encuentro Mundial de Movimientos Populares.
Doná a AICA.org

El cardenal Peter Turkson, prefecto del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano e Integral instó a los Movimientos Populares “a combatir la cultura de la indiferencia y a garantizar la dignidad de toda persona, especialmente en tiempo de pandemia”.

Durante su intervención en el cuarto Encuentro Mundial de Movimientos Populares celebrado el pasado sábado 10 de julio, el purpurado instó a “un cambio que proviene de una vida vivida en armonía con la Creación, bajo el signo de la ecología integral, respetando los derechos de los pueblos indígenas y persiguiendo el bien común”.

Se trata de un primer encuentro con vistas al de septiembre, una oportunidad para compartir el trabajo y las luchas de los Movimientos Populares durante la pandemia, para dialogar con el papa Francisco sobre las conclusiones de los encuentros mantenidos y para escuchar su mensaje.

Reflexionar sobre el impacto del virus en los trabajadores más humildes y marginados fue el punto de partida del debate en el que participaron, informó el dicasterio vaticano, "cartoneros, recicladores, vendedores ambulantes, diseñadores de moda, artesanos, pescadores, agricultores, constructores, mineros, trabajadores de empresas recuperadas, cooperativas de todo tipo, trabajadores de sectores populares, trabajadores cristianos pertenecientes a diferentes sectores y profesiones, trabajadores de barrios y pueblos. que practican la cultura del encuentro y caminan juntos".

El prefecto pidió a los representantes que participaron del encuentro "un cambio de corazón", que nace de haber encontrado el dolor de los que sufren la injusticia, reconociendo el rostro de los frágiles y marginados llamados a reaccionar y a comprometerse, a actuar con urgencia "para poner la economía al servicio de la persona" para hacerla "justa". 

"Los pobres", añadió, "no sólo sufren la injusticia, sino que también luchan contra ella. Y esto es fundamental para el Movimiento Popular, que no sólo representa al pueblo que lucha contra los que sufren la injusticia, sino que también es el grupo que busca establecer para ellos el orden económico social justo".

"Los retos a los que nos enfrentamos", subrayó el prefecto, "no pueden afrontarse en solitario. Necesitamos la solidaridad entre nosotros, que es la base de una cultura popular que parte de las periferias, creando un nivel muy profundo en las relaciones entre las personas, promoviendo la integración en la sociedad". 

La solidaridad como pegamento y principio para llevar las estructuras desiguales de la sociedad hacia la igualdad y hacia la justicia, la solidaridad social, la paz. 

El cardenal Turkson precisó que "estamos haciendo historia": llevando a cabo una lucha que pretende superar las causas estructurales de la pobreza y la injusticia, persiguiéndola -como indicó Francisco en repetidas ocasiones- con valentía, con inteligencia y con tenacidad y no con fanatismo y violencia.

Un reto que hay que afrontar con respeto a la propia diversidad, como sugiere el Papa cuando pone el ejemplo del poliedro para alcanzar, siguiendo caminos diferentes, un mismo objetivo. 

Por lo tanto, devolver la vitalidad también a la propia política, yendo "más allá de las formas paternalistas de asistencia y revigorizando las estructuras de gobierno local, nacional e internacional que permitan a los miembros de los movimientos populares convertirse en verdaderos protagonistas del bien". 

"Promovemos y profundizamos el proceso de cambio como resultado de la acción de la gente", defendiendo "el trabajo decente, luchando por crear empleos dignos a través de la inclusión y promoviendo una economía comunitaria y social que proteja la vida de las comunidades en la que la solidaridad prevalezca sobre el beneficio".

"Luchamos contra la cultura de la indiferencia" y "mientras perseguimos nuestra propia dignidad, también protegemos la de los demás".+